QUE RICOS SON LOS VIEJITOS

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Alonso70.
Pues no, en verdad que no, los comentarios son en su mayoría de gente elitista que busca romances o idilios duraderos, yo en lo personal, solo busco sexo, no importa el físico ni la edad, si son jóvenes, maduros, feos o guapos, no me voy a casar con ellos, yo solo me fijo en que tengan una buena herramienta entre sus piernas y que la sepan usar muy bien, pero conociendo a un adulto mayor me di cuenta que tiene otras cualidades, como la paciencia, la dedicación para hacerte sentir como una verdadera puta, el esmero que pone en cada caricia y en cada lamida, y justo hace poco más de un mes conocí a uno de estos viejitos en el cine porno al que frecuento ir, de entrada nadie da nada por él, ya que es un tipo como de 67 años, de más o menos 1.
70 de complexión mediana, y además usa bastón por que su rodilla izquierda no le funciona, normalmente no pregunto nombres, pero con el ya llevo 5 sábados seguidos, teniendo sexo de formas muy ricas y placenteras ahí en el cine, y fue hace 8 días que le pregunte su nombre, Rafael, Don Rafa, como le dicen cariñosamente los pocos tipos que lo ubican ahí.

Todo comenzó hace unas cinco semanas atrás, era un sábado en la mañana llegue puntual a la hora que abrían el cine, de hecho fui el primero en entrar, pase directo al baño a quitarme la ropa de calle, y salí con un mallón negro pegadito y a la cadera, y arriba una blusita negra de manga larga, abajo del mallón llevaba tanguita negra y medias la muslo negras también, camine al rededor de la sala, y vi a pesar la escasa luz, a tres personas sentadas distribuidas por la sala y dos más en la parte de atrás justo donde esta una barda junto a la entrada, me detuve ahí, Rafa se acero y me empezó a acariciar las nalgas, yo para facilitarle las cosas, me quite de plano el mallón, quedándome en tanga y medias, el se despacho en grande, y comenzó a sobar mis piernas y mis nalgas, yo quería que se agachara y se comiera mi culito pero no lo hacía entonces camine hacia un par de butacas alejadas de la entrada, y ahí cuando vi que caminaba con ayuda de un bastón, nunca he discriminado a nadie por nada, así que deje que se sentara junto a mí, comenzó a besarme el cuello y a subir mi playerita chupaba deliciosamente mis tetillas y poco a poco me hacia entregarme a él en su totalidad, cuando de repente paro y se desabrocho su pantalón un pene de muy buen tamaño salió de él como impulsado por un resorte, puse las rodillas sobre el asiento de mi butaca y me acache a lamer y chupar ese pene delicioso que se me ofreció, en cada lamida lo metía hasta el fondo, no era monstruoso pero tampoco era pequeño tenía el tamaño ideal, no hacía que me provocara ganas de vomitar como otros penes enormes, pero tampoco sentía que no me llenara mi cavidad bucal, era un pene que se podía disfrutar sin sufrir al principio.

Mientras estaba agachado lamiendo esa deliciosa herramienta él sobaba mis nalgas y de vez en cuando metía uno de sus dedos en mi culo, me lo daba a chupar para lubricarlo y después lo introducía en mi ano, yo me empezaba a sentir mas y mas caliente, hasta que después de un buen rato de mamársela, me levante y le dije, ¡Quiero que me cojas! ¡Méteme la verga por favor! Saque un condón de sabor de mi mochila y se lo puse con la boca, y lo mantuve ahí hasta que casi le quite el sabor artificial, después levantándome me puse frente a él dándole la espalda, y poco a poco me fui sentando en su pene erecto hasta tenerlo dentro en su totalidad, una vez dentro de mi movía mis caderas en círculos, y después de atrás para adelante batiendo esa verga con los movimientos violentos de mis caderas, él solo se aferraba a mis cintura con sus manos y acariciaba mi espalda, subía mi blusa y besaba mi espalda, y mi cuello por detrás, yo me sentía completamente abandonada al acto, varios tipos se fueron a sentar cerca de mostros para disfrutar el espectáculo y otros de plano se ponía ahí cerca de pie, hasta que por fin, Rafa gimió como si estuviera herido y enterró sus uñas en mis nalgas, señal inequívoca de que le llegaba el orgasmo, y a pesar de que traía puesto el condón, sentía las pulsaciones de su semen, al momento de chorrearse, aminore los movimientos de mi cadera para que disfrutara la manera de como lo exprimía con mi culo, y cuando vi que se quedo quieto, me levante con cuidado para salirme sin que se moviera el condón, una vez fuera le retire el condón y le limpie la verga con mi boca, él se seguía retorciendo hasta que finalmente me levante y me dio un beso muy tierno en la frente diciéndome ¡Eres maravillosa! me encantaría que fueras mi novia, cuando dijo eso me dio gracia pero no me reí por que él parecía muy serio cuando me lo dijo, por lo que le respondí, pues vamos a ver qué sucede, de momento te veo el próximo sábado misma hora mismas butacas, de ti depende que tome en serio tu proposición.

He conocido muchos hombres así, solo han sido aventura de un rato, y jamás pregunto sus nombres, parece muy arriesgado pero en realidad me cuido mucho, jamás tengo sexo sin condón, desconocidos o no siempre me protejo, solo tengo relaciones sin condón cuando ambos nos practicamos el examen y decidimos hacer vida de amantes, pero con los de primera vez soy muy selectivo y cuando huelen mal o tienen cosas raras en sus miembros, como granitos o verrugas, ni siquiera los toco, pero Rafa había pasado la prueba, desde que se acerco olía a limpio, a recién bañado, y al revisarle su pene, se sentía limpio y olía a limpio también, pero como él han pasado muchos y por lo mismo creí que el siguiente sábado ya no lo volvería a ver, pero me equivoque, llegue puntual y me senté en las mismas butacas y a los 3 minutos llego él, repitiendo la misma dosis de placer que la semana anterior, una vez tranquilos le pregunte que pensaba de un pasivo que le gustaba venir a estos lugares a tener sexo pero que buscaba los tríos o incluso las orgias, me miro y me respondió sin rodeos.
"Si a ti te gusta lo puedes hacer yo solo quiero que goces y seas feliz cuando estás conmigo"

La respuesta me desconcertó un poco quizás lo decía para seguirme cogiendo o solo para hacerme sentir bien pero que tal si en la realidad no le gustaba verme empinada dándole el culo a otro mientras se la mamaba a él o bien, mamándosela a otro mientras él me tenia bien ensartada, bueno no tuve que esperar si no al siguiente sábado para saberlo, ya que mientras estaba empinada con las rodillas sobre mi butaca mamándole la verga a mi viejito, sentí además de sus manos otras que empezaron a sobar mi nalgas, me incorpore y vi a un tipo en la fila de butacas de atrás, él tipo se levanto y se saco el pene de su pantalón, al tenerlo cerca pude detectar un tufo horrible como de pescado echado a perder, por lo que gentilmente lo rechace, me volví a sentar en mi butaca y espere a que el tipo se fuera, Rafa me pregunto que él pensaba que me gustaban los tríos, y le explique que si siempre y cuando fueran como él limpios y sanos, y que además yo escogía con quien cogía.

Después de unos minutos, volví a ponerme a mamar esa verga rica y erecta, hasta que instantes después me senté en él como en los dos sábados anteriores, pero en esta ocasión mientras lo hacía, un tipo distinto al primero llego y se paro frente a mí, me puso su verga frente a mi cara y pude oler un pene limpio incluso talqueado, de inmediato lo toque, estaba hermoso, terso, gordo y se apreciaba más grande que mi viejito, de inmediato lo metí en mi boca, y trataba de comerlo todo, aunque ya sintiéndolo al fondo en su total erección, los ojos me lagrimeaban del esfuerzo y las ganas de vomitar se hacían presentes, pero estaba tan deliciosa esa verga que me aguantaba, al mismo tiempo batía mis caderas con la verga de Rafa dentro de mi culo, ¡Que deliciaaa! gozaba muchísimo así, no paraba de gemir ya que la verga del invitado no me dejaba hablar, de repente el tipo se salió de mi boca, y me pregunto ¿Quieres que te coja? yo no dije nada, saque un condón de mi mochila y se lo di, después me levante y me salí de Rafa, me volví a poner de rodillas sobre mi butaca para mamarle la verga a mi viejito, el tipo entendió cuando vio mi culo empinado y libre, se puso de tras de mí, con mi mano constate que tuviera puesto el condón, lubrique mi culo lo mas que pude con mi saliva, y sentí la punta de ese pene enorme y gordo, un gemido de dolor se escapo de mi garganta, ¡Haaay despacito por favor! Él tipo hizo caso y poco a poco sentí como se fue enterrando en mi culo esa enorme verga, eso me calentó en extremo y empecé a mamar la verga de Rafa de manera desesperada, y de vez en vez, mordisqueaba la cabeza de su pene, arrancándole deliciosas convulsiones, Rafa acariciaba mi cabello, y me preguntaba ¿Te gusta la verga que te está cogiendo amor? y dejando de mamar por un instante le respondía ¡ Ho siii es riquísima, esta enorme y me coge delicioso, siento que me rompe el culo, me encanta de verdad me encanta!!

¡ Qué rica te ves así! Decía Rafa, hasta que el tipo se tenso y sujeto fuertemente mis caderas, mientras yo trataba de exprimirlo contrayendo mi esfínter, me sentía tan caliente que le quite el condón a Rafa para sentir cuando se venía, un chorro de semen espeso y caliente se proyecto en mi cara, con una de mis manos embarraba su pene por todo mi rostro, y después lo metía en mi boca para limpiarlo, el tipo de atrás se incorporo y se fue dándome las gracias, yo no me vine, pero había gozado como pocas veces, ya más relajados Rafa me volvió a preguntar, ¿Te gusto? Me encanto papi, ha sido una de las cogidas mas deliciosas de mi vida, y después mirándome con ojos tiernos me volvió a preguntar, ¿Entonces si quieres ser mi novia? Me dio tanta ternura que no pude negarme y diciéndole ¡Siii! Tome su cara con mis manos y le di un beso largo y apasionado en la boca, hurgando con mi lengua y enredándola en la suya.

Apenas este sábado pasado, mientras le mamaba la verga, me levanto de manera sutil y me dijo sabes, me encantaría comerme tu culito, vaya, pues a mí eso me fascina, pensé en mis adentros, pero con su condición de no poder doblar ambas rodillas se complicaba un poco, así que para complacer a mi viejito, me quite todo dejándome solo la tanga de hilo y la playerita, después dándole la espalda me pare frente a él mientras él permanecía sentado en su butaca, y así comenzó a besar mis nalgas y lamer la entrada de mi culo, haciendo a un ladito el hilo de la tanga, pero por mas que se estiraba aun le quedaba lejos mi hoyito, entonces decidí facilitarle aun más las cosas, y así como estaba dándole la espalda apoye mis rodillas sobre los descansabrazos de su butaca, quedando mi culo prácticamente pegado a su cara, él de inmediato huido su lengua en mi culo, ¡Wooowww que delicia, apenas la semana pasada le acababa de preguntar su nombre y en ese instante no dejaba de repetirlo, Rafa hoo Rafa, asiii Rafa, que rico me comes el culo Rafa, mmmm, maaas maaas que ricoo papacito, que rico me haces gozar, después de un buen rato lamiendo y chupando mi culito, se separo y me dijo dame un condón te quiero coger, de inmediato, me levante y saque un condón de mi mochila, se lo puse como siempre con mi boca, y cuando me iba a sentar en él, me detuvo y me dijo, no, quiero cogerte así de pie, híncate sobre tu butaca y así lo hice, puse mis rodillas sobre el asiento de mi butaca y recargue mi torso sobre el respaldo él se puso detrás de mi y sin contemplaciones hundió su verga de un solo movimiento.

¡Haaa haaa que duro esta! ¡No pares, por favor no pares! Empinaba mi culo y lo restregaba en su pelvis, el seguía embistiéndome, y el choque de su pelvis con mis nalgas producía ruidos como los aplausos, por lo que de inmediato empezaron a llegar los mirones, sentía manos en mis piernas y mis nalgas, también en mi espalda hasta que un par de tipos se pasaron a la fila de butacas de atrás con sus penes de fuera, tome uno con cada una de mis manos, y al sentirlos como a mí me gustan los empecé a lamer, alternándolos en mi boca, cada que podía gemía y pedía mas y mas, Rafa seguía cogiéndome de manera violenta preguntándome, ¿Te gusta amor? ¿Estás gozando? Yo solo gemía y asentía con la cabeza por que las vergas que alternaba en mi boca no me dejaban hablar, entonces Rafa se salió, tomo su bastón y se paro frente a mi invitando a uno de los tipos a cogerme, yo le extendí un condón, lo revise y de igual modo que Rafa el tipo me penetro de manera violenta, así me tuvieron hasta que el tipo que me cogía se vino, con cuidado lo saque de mi culo para que no se fuera a salir el condón, y entonces el otro tipo al que le mamaba la verga hizo lo mismo, por lo que también le di un condón este se sentía un poco más grande que el anterior y que Rafa, por lo que con este gemí mas fuerte y moví mis caderas mas violentamente, el tipo sabía lo que se cargaba y el placer que daba, por lo que eso le dio la confianza para plantarme un par de nalgadas sonoras que se escucharon en toda la sala, diciendo en el momento que me nalgueaba ¡ Que rica Puta! ¡ Que culote tienes mami, así acábate mi verga! ¡ Acábatelas todas putita! y terminando de decir eso se tenso y aferrando sus manos a mis nalgas se vino en dentro de mi, con el condón puesto, ya solo me quedaba Rafa, le quiete el condón, lo mame intensamente hasta que exploto, parte en mi boca y parte en mi cara escurriéndose a mi pecho, ya que para ese momento estaba ya completamente desnuda, después que Rafa termino, me senté en mi butaca, mi respiración era agitada, y estaba bañada en mi propio sudor, Rafa se arreglo la ropa y se sentó a mi lado, poco a poco los mirones se empezaron a dispersar, ¿Te gusto amor? ¡Qué pregunta papacito! Fue una cogida memorable, ojala y tengamos muchas de estas le dije, entonces mirándome de nuevo, a los ojos, me hizo otra pregunta, ¿Si te gusta ser mi novia? Lo mire a los ojos, y le dije, No amor, no soy tu novia, soy tu puta, puedes cogerme como se te pegue la gana, puedes usarme y compartirme, de hecho por eso me gusta seguir viéndote, porque me dejas gozar y que me gocen, entonces con una cara distinta llena de lujuria me dijo: Me encanta verte así sabes, siempre quise tener una putita así de caliente y lujuriosa como tú, y me encanta verte coger haces que me ponga bien cachondo y que me den ganas de metértela, haces que de inmediato se me pare la verga y quiera cogerte violentamente, ya no dijo mas, nos besamos, y en cuanto termino, empezó a lamer mis tetillas y mi vientre sudados, lo detuve y le dije no, no hagas eso, y levantando su cabeza me miro y dijo, sabes delicioso, deje que me besara lo que quisiera, y así, solo con besos y caricias me arranco un orgasmos delicioso, afortunadamente como estaba desnudo mi semen se embarro en mi piel que minutos después limpie.

Llevo ya cinco sábados teniendo sexo con él, hemos tenido variantes de repente se nos une alguien, o a veces nadie, de cualquier modo es delicioso el sexo con él, tiene 67 me lo dijo apenas el sábado anterior, pero coge como un muchacho de 20, ojala y me encontrara mas "Viejitos" Como él, sin dudar les daría prioridad, porque simplemente sabe cómo hacerlo, como llevarte a la antesala de la lujuria, hasta que me entregue completamente, me preparara y cuando quiere hacerme lo que sea, seguramente le diré que si, por que ya para ese momento estoy híper caliente por sus besos y caricias previos, bien pues ardo en deseos de que llegue el próximo sábado para ver de nuevo a mi viejito, lo adoro, se está convirtiendo en un vicio, porque ya siento que lo necesito, cuando menos 3 o 4 veces por semana y no cada sábado, pero bueno, haber que pasa, mientras a gozar.