SELVA DE SEMENTO I.5
*RELATO FICTISIO* Recuerdo bien lo que me había pasado con Midas, pero todo fue resultado de una mentira ya que según el me había quitado mi virginidad, pero realmente se la había entregado al hombre de mis sueños..
Iba en camino al trabajo con un poco de atraso, pensando en todo lo que me había paso durante las últimas 24 horas, me habían corrido de mi casa y había tenido que entregarle el culo a Midas, un tipo que me cogio el culo con 25cm de verga hasta que se quedo con los huevos secos y dejo mi culo amoldado a la forma de su miembro, podría incluso decir que fue una violación, pero la verdad es que si bien al principio me tuvo amarrado y me golpeo, al momento de la penetración lo disfrute como loco ya que su verga era deliciosa pero me ayudo ya que pude dormir en una cama comoda esa noche, pero todo fue debido a una mentira, ya que le había dicho que el era el primero en penetrarme, quien tuvo el placer de hacer eso fue Ruben mi compañero de trabajo de 17 años y nieto de Don Jenaro, el dueño de la tienda donde trabajaba, y todo comenzó la noche antes de que me corrieran de mi casa, cuando fui a la fiesta que este hizo en su casa y comenzó de manera muy simple.
Desde que Ruben sacó el porro que le regalaron y lo prendió quise escapar de su casa ya que temía que mis padres me fueran a oler y pensaran que había estado drogándome, pero la verdad es que cuando el olor inundó mi nariz por primera vez fue algo que me llamó la atención como no tienen una idea, aunque mi temor aun seguía ahí, sin embargo, mientras más fumaban Ruben y Enrique yo comencé a sentir también un efecto extraño como de relajación infinita el cual me hizo disfrutar mucho de las platicas vagas que estaban teniendo.
Con el paso de los fumes Ruben había comenzando (sin que yo me diera cuenta) a aventarme el humo de sus caladas en la cara haciendo que el efecto fuera mucho más rico y placentero mientras que Enrique ya comenzaba a perder una batalla contra el sueño provocado por la combinación de marihuana y alcohol hasta que cayo profundamente dormido en el sillon en el que estaba sentado, fue ahí que Ruben comenzó a acercarse a mi poco a poco mientras platicábamos, siendo honesto, disfrutaba mucho de la compañía que Ruben representaba en mi vida ya que desde que nos conocimos nos hicimos amigos con bastantante facilidad a tal punto que nos volvimos confidentes, nos aconsejábamos en nuestros problemas amorosos y no contábamos nuestros problemas más personales, pero esa noche, algo había en el ambiente que hizo que ambos diéramos el paso para probar más cosas
R- Y cuentame Eli ¿Cómo van las cosas con Denisse (mi novia de en ese tiempo)
E- Pos de la chingada, desde que dejé la escuela, me han llegado rumores de mis amigos que parece anda de puta con otro wey- le dije medio triste
R- Chale, carnalito, que mala pata- me dijo mientras le daba otra calada a su porro cuyo humo aventó en mi cara -pero pos así son los temas con las viejas, aunque creo que lo único malo es que nunca pudiste cogértela como querias- Ruben conocía por algunas fotos a mi novia y sabía que había hecho el intento de cogérmela varias veces para perder mi virginidad, pero nunca se concretaba -pero no te preocupes, carnalito, vas a ver que encontraras algo mejor
E- Si no es que ya lo encontré- dije en voz baja pensando que no me había escuchado
R- Chismecito- dijo aplaudiendo -a ver, cuenta de tu nueva vieja- Yo comencé a ponerme de mil colores por los nervios y el pareció darse cuenta -bueno, si gustas- dijo riendo
E- Es que, como decirlo, no es una vieja- le dije mirando al suelo, pero pareció que ese detalle captó aún más su atención
R- Ah cabron ¿no me digas que eres puto?- dijo en tono burlesco, cosa que me molestó un poco y, al darse cuenta trato de corregirse -Mira carnalito, no te lo digo por estar grifo (mariguano) o pedo (ebrio), te lo digo de carnales, no tiene nada de malo que te guste la verga mientras lo disfrutes todo chido- dijo pasando su brazo por detrás de mi cabeza -es más, acá entre nos, a mi también me gustan lo vatos- dijo susurrándome al oído dejándome sentir el olor del alcohol en su aliento, yo quede sorprendido ante esa confesión -así que, si necesitas consejos sobre como ligar con vatos, dime con confianza- me dijo sonriéndome de esa manera tan cálida como cuando recién me conoció
E- Es que, mierda, no sé cómo decirle
R- Se directo, tengo un profesor de la prepa que hace poco en una clase nos dio un consejo chingon “no te quedes con las ganas de decir lo que sientes, solo dilo y ya, de todos modos el no ya lo tienes asegurado, pero que tal si te dice que si”
E- ¿Tu crees?- le pregunte nervioso
R- A huevo, tu ve tras ese cabron y dile lo que sientes- me dijo con una sonrisa mientras acariciaba suavemente mi cabeza, fue entonces que me decidí y, mientras me daba esa muestra de cariño me aventé a darle un beso suave en los labios, el me separó sorprendido -no mames, Eli- me dijo sorprendido mientras veía si Ruben seguía dormido -¿en serio te gusto?-
E- Si- le dije apenado, el continuo mirándome en silencio por lo que sentí fue una eternidad, pero ya estaba hecho -como tu dijiste, el no ya lo tengo asegurado, pero no iba a perder la oportunidad- le dije sonriendo, poco a poco me separé de el pero tomo mi mano y me jalo hacía el comenzando a besarme de manera apasionada provocando una guerra de lenguas en el interior de nuestras bocas hasta que, de un momento a otro, quede sentado sobre el mientras comenzaba a pasar sus manos por todo mi cuerpo.
Tras un rato besándonos procedió a cargarme como si no pesara nada y me llevo en brazos hasta su cuarto donde me aventó como un costal de papas y al cerrar la puerta quedamos alumbrados solo por la poca luz que lograba entrar en su ventana, continuamos en nuestro pequeño faje por un buen rato mientras el paseaba sus manos de mi torso a mis muslos, deteniéndose sobre todo en mi espalda y nalgas lo cual me hacía soltar suspiros de placer, fue entonces que Ruben comenzó a desnudarme lentamente quitando primero mi playera, luego de deshizo de mi calzado y mis calcetines y dejó al ultimo mi pantalón, al quitarlo regreso a besar mis labios y comenzó también a atacar mi cuello suavemente dándome besos que me provocaban soltar pequeños gemidos mientras comenzaba a quitarle la playera que llevaba dejándome ver por primera vez ese cuerpo que tanto me había imaginado
Ruben, como mencione en la parte anterior, a sus 17 años ya tenía un cuerpo de adonis gracias al ejercicio, siendo honesto, él era la única razón por la que me seguía presentado a trabajar en la tienda, así que ver ese torso desnudo por primera vez, sumado a los borregazos que me había aventado (el borregazo es cuando te echan el humo de la mota para que pegue sin que tengas que fumar directamente) me tenía sumamente caliente a tal punto que tenía una erección marcada en mi ropa interior la cual, en cuanto noto, comenzó a acariciar mientras continuaba besándome el cuello, fue ahí que, sin pensarlo, llevé mi mano a su entrepierna encontrándome con un bulto que me hizo desearlo aun más, pero el me detuvo
R- Espera peque, que te quiero disfrutar- me dijo comenzando a bajar de mi cuello a mi pecho, lamiendo mis pezones haciendo que lo pegara un poco más a mi cuerpo dándole a entender que lo estaba disfrutando mientras escuchaba como se desabrochaba el pantalón quedando como yo, solo en ropa interior, mientras tanto continuaba paseando su boca por mi pecho lamiendo mis pezones, mi cuello, mis clavículas, mis axilas, todo lo que pudiera, pero se detuvo al llegar a mi entrepierna -¿Sabes cuantas veces quise tenerte así, cabroncito?- dijo mirándome mientras bajaba mi pequeño boxer dejándome completamente desnudo -estas hermoso, cabron- me dijo sonriendo
La verdad es que aun y con 14 años tenía un cuerpo que muchos adultos envidiaban ya que gracias al esfuerzo físico que hacía en la tienda cargando y acomodando cosas este había comenzado a desarrollarse poco a poco haciéndome lucir un poco marcado, con unas piernas grandes y un culito levantado, además de que contaba con mis bastante envidiables 17cm de gruesa y venuda verga la cual fue lo primero que Ruben lamio al dejarme desnudo, comenzando a hacerme mi primer oral el cual me volvió completamente loco, ya que primero paso su lengua de mi glande bajando por todo mi miembro hasta llegar a mis testículos los cuales succiono suavemente provocando que lo detuviera
E- Espera, espera- le dije alejando su cabeza de mi entrepierna con respiración entrecortada provocando que Ruben me mirara confundido
R- ¿Estas bien, Eli?- me dijo acariciando mi pierna
E- Lo siento, es que estaba a punto de venirme y no quiero ser el único que disfrute de esto- le dije tomando la mano con la que me estaba acariciando la cual llevé a mi rostro, entendiendo mi señal comenzó a besarme suavemente de nuevo poniéndonos ambos de pie, me encantaba sentir su lengua invadir mi boca y sus brazos apretarme contra su cuerpo, pero su altura era un pequeño inconveniente ya que el mide alrededor de 1.75 y yo 1.60, así que tenía que pararme en la punta de mis pies para poder besarlo como quería -acuéstate- le dije, cuando lo hizo me puse encima de el para poder continuar besandolo mientras el continuaba con sus caricias por mi espalda y comenzaba a apretar mis nalgas.
Fue en ese momento, y con mi poca experiencia, que comencé a hacerle lo mismo que el me había hecho, baje de sus labios a su cuello con besos suaves que lo hacían soltar gemidos, continue hasta llegar a su pecho y fue ahí donde me quede más tiempo, lamia sus pectorales marcados y sus pezones duros llenándome de su olor dulce por la loción que usaba y el sudor del día laboral, esa combinación me hizo ir a sus axilas para poder lamerlas y pasar mi nariz olfateándolo tanto como pude inundando mi mente con su aroma de hombre, continue pasando mi lengua por su pecho hasta llegar a su estómago donde me encontré con aquel bulto que en algunas ocasiones sentía que me repegaba en las nalgas, estaba a punto de satisfacer mi curiosidad de verlo finalmente así que coloque mis manos en su cintura y lentamente fui bajando la truza que llevaba puesta liberando una verga hermosa, medía poco menos de 20cm, gruesa y llena de venas las cuales podía sentir palpitando en la palma de mi mano, además de que tenía un cipote rosita que comenzaba a asomarse por su prepucio dejando ver qué estaba soltando una gran cantidad de liquido preseminal el cual limpie pasando mi lengua haciendo que se retorciera de placer, esa fue mi señal para intentar meterme su miembro por primera vez en la boca, pero cuando iba a la mitad me detuvo
R- Espera peque, me lastimas- me dijo mientras acariciaba suavemente mi cabeza -¿es la primera vez que chupas una verga tan grande?
E- Es la primera vez que chupo una verga, en general- le dije con un poco de pena
R- No me digas que eres virgen
E- Si, nunca había llegado tan lejos con nadie, Denisse solo me dejaba manosearla y, cuando mucho, chuparle las tetas- le dije apenado, cosa que fue recibida con una risa de Ruben, yo quería que la tierra me tragara
R- Ahora entiendo porque estuviste a punto de venirte con solo una mamada- dijo riendo -no te preocupes, eso ahorita lo resolvemos, yo te enseñaré esta noche- dijo mientras me sonreía tomándome nuevamente de la cara para besarme -tu disfruta, Eli, prometo que no te arrepentiras de darme tu virginidad
Cuando dijo eso me tomo nuevamente de los hombros y me acostó en su cama poniéndose nuevamente entre mi piernas las cuales flexione dejandole a la vista mi verga erecta, mis pequeños testículos y un poco de mi culo, el me volteo a ver con una sonrisa y me dijo que para dar una buena mamada, siendo aun novato, debía esconder mis dientes en mis labios comenzado a darme una muestra donde metió mi miembro entero en su boca hasta llegar a lo más profundo de su garganta, dejándome sentir la suavidad de su lengua y labios y la humedad de su boca por toda la extensión de este, lo cual me hizo comenzar a retorcerme por el placer que estaba sintiendo, después de unos cuantos minutos disfrutando de su felación, hubo un momento en que baje mi mirada para poder observarlo y vi que el también me miraba, así que tomo mi mano y la llevo a su cabeza haciendo que yo llevara el ritmo de aquel primer oral, pero la verdad es que en cuanto empuje su cabeza la primera vez para sentir el fondo de su garganta no pude evitar venirme en su boca sin tener oportunidad de avisarle llenando su garganta con 3 potentes chorros de mi semen, él se separó de mí entrepierna y pude sentir como su mirada se clavaba en mi dandome a pensar que había arruinado todo, pero grande fue mi sorpresa cuando me tomo de la nuca y comenzó a besarme compartiendo conmigo la leche que le había dado, haciéndome probar mi propia lefa
R- Que rico juguito de niño- dijo cuando se separo de mi tragando los restos que habían quedado en su boca, yo ya había probado mi propio semen en algún par de ocasiones tras masturbarme, pero el sabor de este mezclado con su saliva hizo que fuera aun más delicioso, luego regreso a mi entrepierna y comenzó a pasar su lengua por todo mi miembro que seguía tan duro como al inicio de nuestra faena -ahora, me toca probar algo más- dijo tomando mis piernas y empujándolas hasta que quedaron mis rodillas junto a mi cara dejando ante su mirada mi virgen culo abierto de par en par -uffff, que rico que ve esto- susurro antes de comenzar a lamer y mordisquear mis nalgas provocando en mi un escalofrío que recorrió toda mi espalda y escapo de mi cuerpo en forma de un gemido, olfateo un par de veces mi ano dejándome sentir su respiración para luego comenzar a lamerlo como si fuera el helado más rico que hubiese comido en su vida mientras que yo me retorcía de placer, tuve que llevar un cojín que tenía en su cama a mi boca para que mis gemidos fueran callados debido a que sentía un placer que nunca me había imaginado, pero al poco rato se separó de mi mirándome nuevamente de forma inquisidora -¿seguro que eres virgen?- me pregunto directo
E- Si, aunque a veces, cuando me masturbo, de vez en cuando lo hago metiéndome un dedo por el culito- le dije apenado
R- ¿Desde cuándo lo haces?- las palabras no salieron de mi boca, pero una nalgada suya me hizo hablar
E- Desde la primera vez que sentí que me arrimaste la verga- le dije con un gemido, parece que eso lo hizo calentarse aun más porque volvió a lamer mi virgen agujero pero ahora con más pasión dejándome sentir como a poco su lengua se abría paso por mi ano hasta que pudo invadirlo sin problema -ah, Ruben, no mames, que delicia- le decía gimiendo mientras que su lengua era reemplazada por uno de sus dedos, al ser más grueso y largo que cualquiera de los mios me provoco una pequeña molestia pero la sensación de placer era mucho mayor ya que lo movió en círculos aplastando mi virgen próstata ya que lograba llegar a zonas que nunca había tocado yo -sigue, papi, sigue- le dije entre gemidos los cuales ya no me molestaba en callar, quería que supiera que me encantaba lo que me estaba haciendo
Luego metió otro dedo el cual, ahora si, me causo un dolor que me hizo detenerlo, el comenzó a lamer mi erecta verga en lo que me adaptaba a esos invasores que me preparaban para lo que vendría después, así que cuando sintió que podía volvió a sus movimientos circulares dentro de mi esfínter haciendo que me retorciera de placer, estuvo así mínimo unos 15 minutos, lamiendo mi ano y abriéndolo con sus dedos y lengua hasta que sintió que estaba listo
R- Te voy a ser honesto peque, lo más probable es que te duela cuando te la meta, así que acomódate como perrito, bien así, ahora, si sientes que el dolor es demasiado no dudes en decirme ¿okey?- yo solo afirme con la cabeza mientras escuchaba que buscaba algo en sus cajones, dos frascos negros, uno pequeño y otro con un gotero -esto que te voy a echar es un lubricante especial para que no sientas tanto dolor, esta hecho con marihuana- dijo poniendo el gotero en mi culito y vaciando el contenido dentro, luego metió nuevamente dos dedos también con ese liquido y comenzando a moverlos, pude sentir como se deslizaban con mucha más facilidad que antes provocándome aun más placer del que ya sentía -si llegas a sentir mucho dolor, solo dale una buena jalada a este frasco y veras que todo cambia en un segundo- me dijo mientras sentía que sus dedos eran reemplazados por su verga la cual comenzaba a pasar entre mis nalgas haciéndome desearla más, podía sentir como palpitaba y estaba llena de su liquido preseminal, de la nada y sin previo aviso sentí como hacía presión en mi culo dejándome sentir como comenzaba la invasión de ese grueso mástil que se convertiría en el dueño de mi virginidad.
El dolor era muy grande, incluso intente quitarme un par de veces, pero el me tenía agarrado con todas sus fuerzas de la cadera, así que no tuve más opción que tomar el frasquito que me había pasado e hice lo que me dijo, lo puse en mi nariz y respire su contenido profundamente, casi al instante sentí un fuerte mareo, pero el dolor disminuyo considerablemente, así que le di otro jalon, sin darme cuenta qué gracias a eso ya tenía la mitad de esa gruesa verga dentro de mi culo adolescente
R- Tranquilo Eli- dijo quitándome el frasco de la mano cuando iba por el tercer jalon -los poppers son de cuidado- luego procedió a darse el un jalon también para después taparlos -relajate, si te vuelve a doler me dices- me susurro al oído mientras lamia el lóbulo de mi oreja, sentía como continuaba empujando su verga abriéndose paso por mis recién desvirgadas entrañas sacándome pujidos de placer, hasta que, sin darme cuenta, sentí su pelvis chocar con mis nalgas dajandome saber que acababa de recibir su verga por completo en mi interior, se quedo quieto un par de minutos en los que mi culo se acostumbraba a su miembro, aprovechando para ambos darle un ultimo jalón a ese frasco mientras el dolor que me provocaba su gruesa verga comenzaba poco a poco a transformarse en placer lo cual me hizo comenzar a mover mis caderas en círculos mientras el movia las suyas comenzando un vaiven suave que me hacía sentir como si su verga intentara jalar mi intestino para sacarlo -al fin eres mio, putito- me dijo mientras tomaba mi cara para comenzar a besarme.
Ahí estaba yo, un adolescente de 14 años dándole su virginidad al chico que tanto le gustaba, me sentía satisfecho al oír los gemidos de Ruben mientras me decía que tenia un culo delicioso, que quería hacer esto desde que me conoció, que me haría suyo, mientras que lo único que salía de mi boca eran gemido de placer. Tras un rato dándome verga de perrito me acomodo para que quedaramos cara a cara y con mis piernas en sus hombros dejándome sentir como sus casi 20cm entraban aun más profundo dentro de mi ser, tuve que darle un jalon a los poppers nuevamente debido a que el dolor había incrementado, pero la verdad es que el me estaba tratando como si fuera una princesa, pero de la nada comenzó a grabar el momento, sobre todo como su verga entraba y salía de mi culo y mis reacciones al sentirlo
R- Quiero un recuerdo de que el primer culito que desvirgue fue el tuyo- me dijo besándome apasionadamente ante la cámara que grabó toda la situación, tras unos minutos apago el video -ahora si, a disfrutar- dijo mientras comenzaba a acelerar sus embestidas, la verdad es ya no me importo callar mis gemidos y parecía que el los disfrutaba como si fueran una señal de que estaba haciendo un buen trabajo, continuo otros 10 mintuos penetrándome sin parar, cada vez más duro y profundo hasta que me dijo -estoy por venirme-
E- Hazlo dentro de mi, quiero que me hagas tuyo, papi- dije abrazando su cadera con mis piernas lo más fuerte que pude para evitar que escapara, pero parecía que mis palabras fueron lo que el quería escuchar, porque comenzó a envestirme más duro mientras que sentía como poco a poco su miembro iba engordando dentro de mi
R- Me vengo, me vengo, te voy a preñar, eres mio, Eli, eres mio- dijo mientras sentía como 5 chorros eran disparados en mis entrañas dejándome lleno de su leche
E- Si, Ruben, soy tuyo, preñame más- le dije sintiendo como me llenaba de su esperma mientras que, sin esperarlo, yo tuve un segundo orgasmo, pero ahora sin tocarme haciendo que me desmayara del placer.
No se cuanto tiempo habrá pasado pero cuando desperté estaba solo en el cuarto de Ruben con un fuerte dolor de cabeza, la oscuridad aun llenaba el exterior y pude ver en mi teléfono que eran apenas las 3am, salí al baño un poco aturdido y confundido por todo lo que había pasado, aun completamente desnudo y grande fue mi sorpresa al encontrarme ahí a Enrique quien estaba orinando, el quedo en shock al verme desnudo y con restos de semen de Ruben escurriendo por mi ano, pero yo quede aun más sorprendido con lo que dijo
K- Entonces el Ru si se atrevió después de todo- dijo sonriendo, quise correr al cuarto para vestirme pero Kike me detuvo y me metió al baño con el -tranquilo peque, tranquilo, no te haré nada- dijo cerrando la puerta y poniendo su mano en mi boca -tranquilízate y te suelto ¿vale?- me dijo mientras acariciaba mi abdomen suavemente y jugueteando con los restos que habían quedado de mi segunda venida -¿Qué pensaban? ¿qué no escucharía su faena? Yo ya sabía que Ruben quería cogerte desde hace mucho, lo que no pensé es que te fueras a dejar con la vergota que se carga- me susurro al oído dejando en shock
E- ¿Tu… sabias?- le pregunte sorprendido
K- Obvio canijo, yo fui quien le enseño todo lo que sabe jeje, de hecho andaba en la sala contándome todo, no te preocupes, de aquí no saldrá nada- dijo mientras su mano ahora acariciaba mi pecho completo -aunque he de aceptar que lo envidio por haber sido el que te desvirgo- entre las caricias en mi pecho y los besos que me daba en el cuello poco a poco el miedo que tenia por haber sido descubierto fue transformándose en morbo, así que sin pensarlo me di la vuelta y bese a Kike quien me correspondió llevando sus manos a mis nalgas para abrirlas y comenzar a acariciar mi aun abierto y húmedo culo -pero mira nada más, te dejo bien roto tu culito- dijo metiendo dos dedos en mi recién desvirgado agujero, acción que respondí con un gemido mientras llevaba mis manos a su miembro humedecido por lo restos de su orina, entonces se abrió la puerta detrás de mi dejándome a la vista de Ruben, quien mostro sorpresa ante lo que estaba sucediendo pero no tardo nada en unirse besando mi cuello y espalda
R- Parece que una sola verga no te fue suficiente, peque- dijo riendo mientras sentía su carne restregándose contra mi culito -Venganse, quiero ver lo que va a suceder- dijo tomándome de la mano mientras Enrique iba tras de nosotros despojándose de sus prendas, estábamos desnudos los tres en la sala, nos sentamos en el sillon más grande y quede entre Ruben y Enrique quienes me besaban y lamian mi cuerpo sacándome gemidos de placer, fue entonces que, sin previo aviso, sentí como un dolor invadía mi cuerpo entero y me di cuenta que Kike estaba comenzando a intentar penetrarme, pero los restos de semen de Ruben parecían no ser suficiente lubricación para lograrlo, así que Ruben fue a buscar nuevamente los frascos de poppers y lubricante mientras que Enrique me tenia mamando su verga poniendo a prueba los consejos que me dio el dueño de mi virginidad
K- Ufff, peque, puedo ver que aprendiste rápido como se mama un verga- ese miembro que entraba y salía de mi boca era como el de Ruben, solo que con la cabeza un poco más gorda y el tronco más delgado pero la gran diferencia era que Kike tenia circuncisión, luego Enrique me acomodo para quedar sobre el mientras continuaba la felación, así tuvo camino libre para comerse mi culo -tan delicioso como me imaginaba que seria- yo solo atinaba a gemir con su verga dentro de mi boca, disfrutando todas las sensaciones que ese beso negro me estaba provocando, hasta que Ruben apareció frente a mi poniendo el frasco de poppers en mi nariz mientras sentía como la lengua de Kike fue remplazada por sus dedos llenos de lubricante canabico, fue entonces que yo solo me puse a mamar la verga que me desvirgo pudiendo saborear los restos de la lefa con la que me había llenado mientras que Enrique me acomodaba para quedar sentado en su verga y sentir como de una sola estocada me metía esa cabezota en el culo, tuve que separarme de Ruben porque estuve a punto de morderlo por el dolor, pero otro jalon a los poppers hizo que poco a poco comenzara a dejar que aquella invasión continuara regresando a mi labor de mamar pene mientras sentía como Enrique se habría paso por mis entrañas hasta estar completamente dentro de mi comenzando unas penetraciones lentas que me hicieron volver a mamar la verga de Ruben para que mis gemidos no se escucharan.
Fueron fácilmente 20 minutos de ser penetrado por Kike hasta que sentí como sacaba su verga lentamente para quedar sentado en el sillon, luego procedí a sentarme en su verga penetrándome a mi ritmo mientras seguía mamando la verga de Ruben hasta que sentí que los dos se vaciaban en mi boca y mi culo llenándome nuevamente de semen, la sensación de la verga de Enrique palpitando dentro de mi mientras que Ruben llenaba mi boca con una segunda carga de su jugo de hombre me hizo nuevamente llegar al orgasmo, pero esta vez fue uno seco, sin embargo, Enrique no se detuvo y continuo sus penetraciones tomándome de la cadera para luego cargarme y cogerme así
E- Espera Kike, detente- le dije suspirando, pero el hizo caso omiso, incluso aumento su velocidad hasta que sentí una segunda carga llenándome aun más de su leche
K- No puedo mi amor, tienes un culo delicioso- decía entre gemidos mientras me besaba
E- Kike, es en serio- le dije entre gemidos -detente por favor, necesito…- antes de terminar mi frase comencé a sentir como me meaba en su pecho sacando un gemido de placer total mientras que Ruben y Enrique miraban sorprendidos como sacaba aquel liquido transparente sin poder evitarlo mojando el pecho y la cara de Kike mientras el continuaba penetrándome ahora más rápido
K- Que rico, cabroncito, te mereces un premio- dijo mientras se venia por tercera vez dentro de mí, fue ahí que nuevamente perdí el conocimiento despertando por el agua que caía sobre mi mientras que Enrique limpiaba nuestros cuerpos, ahí fueron notorias las consecuencias de esa noche de placer, tenía el culo completamente irritado y abierto dejando salir un poco de sangre mientras que Kike estaba lleno de mis meado y con un poco de materia fecal en su verga la cual limpio con bastante agua y jabón mientras me observaba, yo estaba completamente apenado por todo lo que acababa de ocurrir pero el me tranquilizo -¿Ya mejor, mi amor?- yo solo asentí con la cabeza
E- Ruben ha de estar encabronado conmigo por llenarle la casa de miados- dije un poco triste, pero Kike me tranquilizo acariciando mi cabeza suavemente
K- Tranquilo, mi niño, fue mi culpa, debí hacerte caso- dijo riendo -pero la verdad es que teniendo mi verga en ese culito tan rico no pude detenerme, pero no te preocupes- dijo extendiéndome una toalla para secarme, al salir del baño ambos Ruben fue hacía a mi para servirme de apoyo ya que yo termine con las piernas temblando por tanto placer
R- Estas bien, amor- me dijo mientras me llevaba a su cuarto para poder descansar, me acostó en la cama y levanto mis piernas para ver como había dejado mi culo -tienes un poco lastimado, pero ahorita te pondré una crema que te ayudará bastante- dijo, me puso una crema antiinflamatoria y una de marihuana dejando mi culo casi como nuevo
Fue ahí que me di cuenta de que tan tarde era y que no había regresado a casa cuando se suponía, por lo que me apure en vestirme y, sin despedirme ni nada, sali corriendo a mi hogar, el resto ya todos lo saben.
Pues bueno amigos, aquí otro relato más que espero hayan disfrutado, recuerden que pueden mandarme sugerencias y comentarios a mi Telegram @MMMercury, besos.
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