Trabajando e iniciándome en el sexo. Continúa

Dn Alex y su bro… soy su desahogo. Parte I.
Perdón por no haber escrito antes, gracias por sus comentarios y sus correos, pueden seguir haciéndolo. Saludos a todos mis chacalones tapatíos.

Después de ese excitante y deliciosa sesión de sexo con Dn Ángel y mi Alex, el domingo tuve que descansar, en casa dije que estaba algo cansado y me dejaran dormir hasta tarde y como no lo estaría con semejante cogida que me dieron, mi piernas seguían débiles, como si terminara de hacer rutina de pierna en el gimnasio y mi culito, aún un poco adolorido.

Ese domingo descansé todo lo que quise, pero mi mente y mi verga no daban tregua, uno pensando en lo que había sucedido y el otro reaccionando poniéndose durísimo, más que nunca.

El lunes, como cualquier otro fui a clase y mi corazón se aceleraba según avanzaba el día, esperando ver a Dn Ángel y esperando ver que reacción habría también de parte de Alex.

Llegó la salida y me apure a llegar a casa, comí y realicé mi tarea, mamá me dijo que temprano había pasado Dn Ángel para decirle que no iría al trabajo esa tarde, que me fuera yo solo, que Alex me abriría la casa para realizar mi trabajo, mi mente voló pensando que podría pasar entre Alex y yo, pero tmb pensé que Dn Ángel podría estar enojado o tener «sentimiento encontrado» por lo del sábado, pero no di mayor importancia.

Llegó la hora de ir a trabajar y salí de casa, llegando al trabajo alcancé a ver como la esposa de Alex salía de casa y se despedía de él, llevaba con ella una pequeña maleta y una pataleta al brazo, yo encantado vi esa escena, ella alejándose y dejando a mi nuevo amante solito.

Ella se retiró y justo un par de minutos llegué yo, al llegar Alex me recibió:

Alex: Qué tal Jorgito, todo bien? Pásale, que puntual, por cierto.

Yo: Qué tal Dn Alex, pues ya ve, siempre me gusta llegar temprano.

Alex cerró la puerta diciéndome:

Alex: Sabes que me puedes tutear, más estando solos.

Dicho eso me empujó y me puso pegado a la pared, poniéndose detrás de mí, latiendo mi oreja y susurrando:

Alex: Que rico culo, como lo extrañé.

Su tremenda verga se sentía dura restregándose en mis nalgas, mientras Alex lamia mis orejas y me decía cosas como: que rica mi putita, te voy a preparar igual que a mi vieja, te extrañamos mucho mi verga y yo.

De repente se separó de mí, me tomó de la mano diciéndome:

Alex: vente, vámonos al jardín porque aquí pueden vernos.

Nos fuimos, el detrás de mí, no dejaba de pegar su verga a mi culito y decirme cosas sucias. Llegando al jardín me plantó tremendo beso y con sus manos en mis hombros me empujó al suelo, hizo que me hincara, yo sabía lo que venía.

Sacó su tremenda verga, aunque dura, no estaba al cien.

Alex: Ándale putita (dándome una pequeña cachetada), chupa tu caramelo que tanto te gusta.

Saqué mi lengua y lamí su cabeza, en cuanto él sintió lo húmedo, emitió un pequeño gemido, yo seguía con mi labor y él empezaba a desnudarse, se desabotonaba su camisa que lo había ver tan sexy y antojable, pero sin ella se veía muchísimo mejor, levanté los ojos, el me guiñó, sonrió, tomó mi quijada con su enorme mano y escupió en mi boca, no sé porqué, pero eso me excitó

De repente me levantó, me tomó en sus fuertes y deliciosos brazos y me llevó a la recámara en donde le dí su primer mamada. En cuanto llegamos me depositó en la cama, se puso encima de mí y empezó a besarme tocándome por todas partes, me empezó a desnudar y lamia mi cuello, mis pezones, bajaba a mi abdomen y subía, me daba un poco de risa, entre el nervio, la excitación, lo rico que se sentía esa barba de dos o tres días y lo húmedo de su enorme lengua, además que sus manos tocaban y apretaban todo de mí pequeño cuerpo.

De repente me bajó mi pantalón junto con mis calzones, subió mis piernas y las empezó a besar, lamia de mis pies hacia mi entre pierna, lo hacia poco a poco, dando pequeños y deliciosos mordiscos, Diooos lo recuerdo y me pone a mil, de repente dobló mis piernas y dejó expuesto mi culito, esa cuevita que tanto le encantaba recibir la deliciosa verga de ese macho.

De repente escupió mi culto y con la yema de su dedo gordo la esparcio y presionaba un poco, que delica, me sacaba unos pequeños gemidos:

Alex: Así mi amorcito, se que eres toda una putita y eso me encanta, veme, toca como la traigo nomas para ti pequeña.

Tomo mi mano y la dirigió a su pene, que hervía de la calentura que se cargaba ese tremendo garañon que tenia encima.

De repente bajo y empezó a lamer mi pequeño culito, lamia por fuera, lo escupia, ponía un dedo a masajeando y de repente, me puso como perra en celo, introdujo su deliciosa lengua en mi ano, hizo que me retorciera de placer.

Alex: Eso putita, sé que te encanta.

Siguió durante unos minutos en mi culo con su lengua, de repente se escuchó ese ruido que tanto nos pone cachondos, su cierre se estaba abriendo y su verga estaba a punto de salir.

Alex: Amor, estas lista para recibirla en tu culo.

Me puso en cuatro, me volvió a escupir y con su tremenda cabeza empezaba con un pequeño masaje, para después empezar a presionar para que mi culito la recibiera.

Dolía un poco, pero él la sabía usar, poco a poco la deslizaba y se detenía, seguía y se detenía, se movía un poco atrás – adelante, en círculos, un poco más penetraba y se detenía, yo estaba en las nubes de tanta excitación que  sentía, de repente la metió de golpe, ahora si como dicen en mi pueblo: «de la mitad para atrás» entro de repente, di un pequeño grito y él me tapo mi boca con su enorme mano, mientras con la otra me daba tremenda nalgada, no sabía como reaccionar, era muy rudo, pero me ponía a mil.

Alex: cállate puta, sé que lo estabas esperando y que querías que te clavara toda mi verga.. gózala perra.

Yo: Aaaaaay… aaaay amor… aaaay.. siiiii papi, me duele, pero no pares, que rico… aaaaaaay.

Alex: Eso putita, por fin sabes lo que es un macho, no que Dn Ángel ni ha de aguantar.

Tenía razón, yo disfrutaba de Dn Ángel, pero Alex es otro pedo, era como coger con un actor porno.

De repente, sin sacarme la verga, me levantó con sus fuertes  brazos, me volteó cara a cara y se sentó en un sillón cercano, cuando se dejó caer para sentarse, entró toda su verga en mi culito, lo cual me hizo dar un pequeño grito, el cual silenció con un tremendo beso, yo sin dudar empecé a cabalgar aquella tremenda vergota, larga, gorda y super caliente.

Alex: Así… aaaaasiii mi putita, que rico la gozas, si te han enseñado a gozar a un macho.

De repente, con su verga completamente dentro de mí me dio vuelta, me puso de espalda a él y empezó a mover su pelvis, haciendo que su verga entrara cada vez más, pero sucedió algo de lo que no me había percatado, el mismísimo hermano de Alex nos vigilaba, desde una pequeña ventana. Yo no supe que hacer, pero guardé silencio y seguí gozando tremenda verga de mi macho en turno.

Nosotros, Alex y yo, nos paramos, me puso contra la pared y me daba duro… muuuy duro, que rico se sentía eso. Teniéndome a su total disposición, Alex lamia mi oreja y de repente me dijo:

Alex: Invité a mi hermano a gozar de tu culto, pero solo entrará si tu lo permites.

Yo no respondí, solo con mi dedo hacía la señal para que entrara, su hermano era menor que Alex, entró todo gustoso.

Hermano Alex: Estoy que reviento, ya vi que si es toda una putita esta carnal, ve como ando.

Alex: La gozarás bro.

Hermano Alex: Por lo pronto que me la mame, estoy a punto de explotar.

Alex: Ya escuchaste putita, hazle su servicio a mi carnal.

En eso Alex y yo nos pusimos de rodillas para que yo quedara a la altura de la verga hermano, que hasta ese momento no había visto, pero al ver aquello sentí miedo y tentación, aquel tremendo trozo era descomunal, más o menos lo largo que la de Alex, pero grueso, más grueso que el de Alex, yo ya estaba como perra en celo, empecé a lamer aquel caramelo que tenía frente a mí.

Hermano de Alex: Que rico mamá esta puta, nunca me habían hecho semejante mamada carnal, que buena puta me conseguiste.

Alex: Y siempre está disponible a recibir verga, mira la muy puta.

Yo con esa escena, el hermano de Alex practica deportes y se notaba, tenía semejante cuerpazo y aunque no se desnudo por completo, lo que tocaba se sentía delicioso. De repente Alex metió su verga hasta el fondo, sabía lo que se venía.

Alex: Amor… te voy a dar tu leche.

Me daba tremendas embestidas, profundas, rudas, mucho más seguidas y eso provocó mi tremenda excitación.

Alex dándome duro por el culo, su hermano tomaba mis orejas y por poco me hace vomitar y yo… yo no aguanté más, terminé como nunca lo había hecho, tremendos chorros de leche.

Alex: Que rico se siente cuando lo aprietas por terminar… que rico..  mi puta.. aaaaa…. aaaaa… me vengo… me vengo

Hermano de Alex: Eso puta, trágatela toda, te daré de tomar leche para quitarte tu sed.

Ambos empezaron a darme más fuerte y profundo y como si se hubieran puesto de acuerdo…. tremendos choros de leche me aventaron, Alex llenaba mi culo, mientras su hermano me llenaba la boca de aquel líquido delicioso que tanto me encanta.

Alex: Aaaay puta… que rico… ni con mi vieja termino así.

Hermano de Alex: Esta muy rica la puta… deberías llevarla al depa en Guadalajara carnal, ahora que tu vieja se vaya con las primas a pasar la cuarentena.

Alex: Aaaay (apenas si podía hablar, estaba agotado y jalaba aire), que buena idea cabrón, veo que te gustó y eso que no te la clávate.

Hermano de Alex: Ya le tocará gozar mi verga y yo de disfrutar ese culto, pero si con tu verga todavía le sacaste un poco de sangre, imagínate le clavo todo esto (dijo eso agarrando el tremendo miembro que se carga).

Alex: Estaría bien llevarla de paseo a la puta, ojalá sus papás la dejen ir.

Yo: Ya se nos ocurrirá algo mis amores.

(Dije eso mientras con mi lengua lamia el grande de cada verga que tenia a mi derecha y a mi izquierda)

Hermano de Alex: Eres toda una puta mi amor.

Y me dio tremendo besote..

Después de aquello, Alex fue al baño para tomar papel para mí, para asear un poco mi culto, al limpiarme vi un poco de restos de sangre y demasiado semen.

Nos bañamos juntos para limpiarnos y Alex me dejo descansar, me «dio» la tarde para reponerme de semejante cogidota que me acababan de dar.

Alex: descansa amorcito.

Se despidió de un beso, lo mismo hizo su hermano y salieron de la recámara.

Dsps Alex mismo pediría permiso a mis padres para traerme a Gdl a su departamento, pero eso… es otra historia.

 

Ojalá gocen mi relato.

Pueden seguir escribiendo a [email protected]

 

Los leeré.