Un niño en medio de la nada

*Este relato es 100% real, varios datos han sido cambiados por seguridad* Llevo viviendo 5 meses en medio de una comunidad en medio de la nada de las costas de Oaxaca y aquí a la gente no le molesta hace nada mientras les pagues..
Mi nombre es Mercury, soy mexicano, tengo 25 años y hace 5 meses me vine a vivir a una comunidad en las costas de Oaxaca que esta en medio de la nada, aquí mis padres abrieron un pequeño hotel el cual les ayudo a administrar mientras aprovecho la playa totalmente virgen para conocer todo lo que es vivir en el culo del mundo. En mi hotel es común convivir con gente de muchas nacionalidades, grupos de amigos que vienen a descansar después de varios días de fiesta, parejas que quieren disfrutar la soledad del lugar, familias que desean tener un buen rato con sus hijos e incluso ancianos que solo se hospedan para vivir alguna última aventura, pero ellos no se comparan con la comunidad… un grupo de 200 gentes que son familia entre todos (literalmente, todos son hermanos, primos, algún familiar del otro) y lo único que buscan es pescar, ponerse ebrios y que les caiga dinero del cielo.

Uno de los miembros de la comunidad, nuestro coprotagonista, es un niño de 13 años llamado Axel, estudia la secundaria y siempre busca la manera de ganarse dinero para apoyar a su familia, ya sea trabajando honestamente o robando, lo que ocurriera primero, y lo descubrí porque un día lo vi tratando de meterse a la casa de mis padres (yo duermo en un cuarto que esta aparte del departamento que ellos tienen en las mismas instalaciones del hotel), al verlo tratando de abrir la puerta de la casa de mis padres con unas ganzuas, lo sometí golpeándolo en la rodilla y tomándolo del cabello, el se puso pálido y por el miedo no opuso resistencia

M: ¿Qué haces hijo de tu puta madre?- le dije mientras seguía sometiéndolo aplastando su pierna contra el piso con mi pie

A: Nada, te juro que nada- me dijo llorando mientras dejaba caer la ganzua al piso -solo estaba tratando de hacer la chamba que el señor Carlos (mi padre) me encargo

M: ¿Ah sí? ¿Qué trabajo?- el niño se puso nervioso mientras trataba de inventar cualquier escusa para salvarse, yo estaba cauteloso observando las cámaras que mi familia tenia para la seguridad del hotel y de mi hermano menor, casi la misma de aquel pequeño ladrón, motivo por el cual comencé a sentir un poco de pena por el, liberando su cabello de mi agarre -mira pendejo, soy el hijo del señor O, el en ningún momento me comento que iban a venir a ver a hacer ningún trabajo- al escuchar eso se puso blanco y comenzó a tratar de golpearme para escapar de mí, pero fue suficiente un golpe en el estomago para calmarlo -¡MÁS TE VALE QUE TE CALMES, PENDEJO¡- le dije nuevamente tomándolo del pelo incluso arrancándole un poco de este, el se volvió a hincar pero oí una voz a lo lejos que me hizo detenerme

¿?- Joven Mercury ¿Todo bien?- era Josue, el trabajador de mi padre que se encargaba del mantenimiento del hotel (alberca, aires, jardineria, todo lo esencial), un hombre de menos de 1.50 y poco más de 60 años

M- Ven Josue, acabo de encontrar una sorpresita- cuando Josue vio a Axel ambos se pusieron blancos, resulto ser que Axel era hijo de la nieta de la hermana de una de sus primas, porque les digo, acá todos son familias de todos, el punto es que me pidió de mil y un maneras que le perdonara la vida al pequeño -Perdon Josue, pero esto se lo tengo que decir a mi padre, el tomara la decisión, el niño estaba intentando entrar a su casa para robar, así que para evitar meterte en un problema tu también, es mejor que te retires- el solo miro a su sobrino triste y se fue.

El niño dejo caer un par de lagrimas cuando su tio, friamente le dijo “eso te pasa por pendejo” mientras se iba, el niño ahora solo miraba al suelo esperando lo peor pero solo lo pare tomándolo del hombro y llevándomelo a la cocina del hotel la cual esta atrás de la construcción por lo que casi no se escucha ni se ve lo que pasa ahí, lo senté en una silla y me le puse de frente para comenzar a interrogarlo, no fue necesario infundir tanto miedo, el comenzó a soltar la sopa desde que lo senté diciéndome que su papá lo había mandado a buscar trabajo y al ver que la casa estaba vacia quiso intentar robar algo pero no se esperaba que yo estuviera ahí, me pidió que lo perdonara, que no volvería a pararse ahí nunca, que buscaría trabajo en otro lado, ahí fue donde lo detuve

M- ¿A ti te gustaría trabajar aquí?- le dije mirándolo a los ojos, el solo movió su cabeza diciendo que si lentamente -yo podría darte trabajo- le dije serio, el me miro confundido pero me escucho -ayudarías a limpiar la cocina, lavar trates y levantar los cuartos junto conmigo, te pagaría 50 USD a la semana, siempre y cuando no dejes la escuela y cumplas con tus obligaciones, la única condición es que debes hacer todo lo que yo te diga sin rechistar- el se lo pensó y me dijo

A: Ya se que me vas a pedir, vas a querer cogerme ¿no? No quiero eso, si quieres te la chupo pero por favor no me la metas- me dijo mirando todo el tiempo al suelo, yo lo tome de la barbilla suavemente y lo hice mirarme a los ojos

M: No te preocupes, niño- le dije de manera suave -entonces creo que te puedes ir, eso si, no te sorprendas si pronto voy junto a mi padre a que pagues por tus actos- me levante de la silla en la que estaba para caminar fuera de la cocina pero el me detuvo diciendo “esta bien” -ve a tu casa, comienzas mañana- Axel se fue confundido.

Al día siguiente el llegó después de la escuela con un uniforme de deportes apretado que dejaba ver su bultito marcado al igual que sus nalgas. Lo mantenía muy checado mientras hacía sus labores, pero cuando se llegaba a quedar solo aprovechaba para pasarle mi verga o agarrarle discretamente las nalgas mientras que veía que solo se molestaba pero no hacia nada para impedirlo. Uno de esos muchos días le dije al niño que me ayudara a organizar unas cosas del hotel que estaban en un cuarto detrás de la cocina el cual estaba hecho especificamente para sobrevivir los huracanes en caso de que pasara uno por acá, el acepto a regañadientes y que todas las veces que se intentaba poner a la defensiva lo amenazaba con que le comentaria a mi padre que lo cache intentando robar en su casa y el sería quien decidiría las consecuencias.

Mientras ambos estábamos en el cuarto de atrás doblando algunas sabanas y acomodando, varias veces aproveche para tocar su culito parado y restregarle la verga en las nalgas, pero, no se porque en un momento se quiso vengarse y, cuando me vio distraído mientras acomodaba unas cosas con mi culo en pompa el me retrego su verga como varias veces yo se lo había hecho a él, pude sentir una verguita como de 14/15 cm completamente dura la cual llamo mi atención, pero simule enojo para no perder el control de la situación así que lo tome de uno de sus brazos y lo aventé a la cama

M- ¿Así que te gusta andar restregándome tu verga en el culo?- le dije con tono enojado, el estaba asustado mirándome a los ojos -¿Qué? ¿No lo disfrutaste?- le dije mientras iba acercándome a el, el trataba de mantenerme lejos con sus pies pero lo sometí y puse sus piernas en mis hombros dejando caer todo mi peso sobre el quien comenzó a pedirme que lo perdonara, que no lo volvería a hacer -Te jodes, niño, te toca pagar las consecuencias- le dije tomando su pequeño short  de los costados tratando de bajárselo, el ponía toda su fuerza en impedirlo pero con una pequeña bofetada fue suficiente para que dejara de luchar, sabía lo que le tocaba, pero no lo que yo quería.

Al lograr quitarle los shorts pude ver aquella pequeña verga que había perdido su erección por el miedo de Axel, así que comencé a examinarlo de pies a cabeza mientras el me pedía que no le hiciera nada que haría lo que quisiera pero que no le hiciera nada “¿lo que yo quiera?” le dije con una sonrisa, el afirmo casi llorando

M- Ya sabes que quiero entonces, que te dejes hacer sin rechistar- le dije, el me pedía que no continuara pero sabía que no le quedaba de otra más que aguantar lo que viniera, aunque creo que no esperaba que tras separar sus piernas lo primero que hiciera fuera llevar su pequeña verga a mi boca para comenzar a mamarla, la verdad es que el sentir su pequeña erección en mi raja me había llamado la atención y me hacía querer sentirla dentro de mi, cosa que iba a tener si o si. Mientras comenzaba a mamar su pequeña verga la cual poco a poco iba volviendo a ponerse dura lo mire de reojo para encontrarme con una mirada de confusión mezclada con placer, no sabía que carajos estaba pasando pero sabía que podía disfrutarlo sin problema -¿te gustas, niño?- le dije pasando mi lengua por su verga mientras el solo se quedaba inmóvil disfrutando de mi mamada, de lamer su tronco baje a sus huevos los cuales chupe y succione para terminar lamiendo su ano en un beso negro el cual lo hacía gemir como una puta.

Yo para este punto me encontraba masturbando mi verga de 19 cm la cual estaba llena de liquido preseminal mientras seguía mamando la verguita y el culo de este niño moreno que no media más de 1.60, muy flaco y un poco débil mientras que yo media 1.72 y era mucho más pesado que el por lo que no le quedaba de otra más que obedecer lo que le pedía. Cada vez mi lengua entraba más en su culito mientras lo masturbaba usando la saliva que ya le había dejado en su verga, el solo se retorcía mientras me restregaba su culo en mi boca y gemia

A: Que rico se siente como me chupas mi culo, sigue- decía mientras me tomaba del cabello jalándome más a el

M: ¿No que no te gustaba que jugaran con tu culo?- le dije mientras continuaba masturbándolo

A: Es que nunca me había hecho algo así, solo me la intentan meter de golpe, es la primera vez que siento rico- me dijo mientras seguía retorciéndose de placer con cada cosa que le hacía, incluso comenzó a dejar que jugara con sus pezones y en una de esas que estuvo distraído pude besarlo sin que el opusiera resistencia, incluso lo disfruto más de lo que pensaba, tras el beso volví a mamar la verga de Axel quien ahora gemia sin importarle si lo escuchaban o no

M: ¿Ya has cogido, niño?- le pregunte mientras seguía succionando su miembro de manera suave mirándole a los ojos, el me negó con su cabeza

A: Solo me han cogido unos primos a cambio de dinero, pero nunca me han dejado meterles la verga- escuchar eso hizo que mi culo palpitara de ganas, imaginarme quitándole la virginidad a ese escuincle de 14 años, incluso ser la primera persona con en la que depositara su esperma, mi mente comenzó a maquinar mil planes para poder hacer mio a este escuincle ladrón, pero por el momento me interesaba irlo preparando de poco a poco por lo que seria mi propio juguete sexual de carne y hueso, por lo que lo deje llenar mi boca con su leche juvenil la cual trague ya que tenia un ligero sabor dulce pero era bastante espesa -puta, que rico, señor, no pensaba que esto pudiera ser tan rico- me dijo mientras se relajaba en la cama aun retorciéndose de placer, me levanté con mi verga aun erecta y se la puse en la cara

M: Aun te falta pagarme el favor- le dije rosando mi cipote rosa por sus pequeños labios infantiles los cuales se abrieron sin pensarlo para recibir la mitad de mi verga en su húmedo interior lo cual me hizo soltar un gemido mientras empujaba su cabeza para que el resto de mi miembro invadiera su boca hasta el fondo de su garganta, por su reacción pude ver que ya tenía bastante experiencia mamando verga ya que no tuvo ni una sola arcada ni nada por el estilo -que rica boca tienes, putita- le dije mientras movía mi cadera de adelante hacia atrás violando su boca hasta que después de 5 minutos me vine dentro de ella haciendo que Axel tragase mis 5 chorros de esperma, el se separo de mi cuando sintió que mi verga estaba limpia, ahí fue cuando saco mi verga de su boca y me sonrio de manera picara -lo haces muy bien, pendejito- le dije acariciando una de sus mejillas

A: La verdad es que después de que me dejaste venirme en tu boca era lo mínimo que podía hacer, jefe- me dijo con una sonrisa, le dí un beso en los labios el cual el correspondió sin problema -espero la próxima vez pueda probar tu verga de otra manera- me dijo dándome un apretón en mi miembro

M: No te preocupes, pequeño, tendrás mi verga y muchas cosas más cuando gustes siempre y cuando cooperes como ya sabes, quien sabe, igual hasta logras cogerte tu primer culito si te portas bien- le dije guiñándole un ojo -ahora vete, que no quiero meterme en problemas- le dije sacando un cigarro de mi bolso para prenderlo, Axel me miro y me hizo una pregunta interesante

A: ¿Qué tanto más me podrías pagar si me dejo dar por culo ahorita?- me dijo mientras se ponía en 4 presumiendome su culito el cual parecía que me estaba pidiendo más lengua pero no lo hice, la verdad es que requerí de mucha fuerza de voluntad para evitar hacerlo debido a que quería dejar a este niño deseando por más para que así el fuera el que me pidiera verga cuando el deseara.

Salimos de ese cuarto, primero yo mientras fumaba a mi cigarro y luego Axel llevando las sabanas que acabábamos de doblar y sobre las cuales acabábamos de darnos sexo oral mutuamente hasta que vaciamos nuestro semen en la boca del otro, ahora segui ir paso a paso hasta lograr que el niño me rogara que lo cogiera, no sin antes hacer que el me cogiera a mi.

Espero que les haya gustado este relato, queridos mios, recuerden que pueden mandarme sus comentarios mediante mi Telegram personal @MMMercury, les mando besos.