Buscando una nueva verga

Diego, el amigo de mi esposo y mi amante favorito se va de vacaciones y necesito una verga nueva que me complazca..
Diego se fue de vacaciones con su familia y yo necesito una verga nueva que me provoque muchos orgasmos.

Antes de irse de vacaciones me culió bien rico y me dejó la vagina llena de semen.

Verga no me falta ya que mi esposo y mis dos hijos me culean casi a diarios los tres, también necesito una verga que no se de la familia.

Diwgo se fue de vacaciones hace dos días y no paro de masturbarme pensando en él, en esa verga hermosa, enorme, llena de venas, con la cabeza gigante, huevos grandes y que me llena de semen. Es difícil escribir este relato sin masturbarme al mismo tiempo.

El día de ayer después de culiar con mi esposo y más tarde con mi hijo menor, me masturbé tanto que decidí ir a buscar una nueva verga, para esto, me vestí como puta, dejando mis tetas casi al aire libre por el escote y la transparencia la de la blusa con la que me vestí, sin dejar mucho a la imaginación, me puse un jean que ayude a dar forma a mi culo ancho y salí en busca de verga, en realidad de un hombre casado.

Las miradas de hombres y mujeres a mis tetas me excitaban mucho, prácticamente todos los que estaban en el centro comercial me quedaban viendo las tetas. Finalmente cuando estuve en una cafetería, logré conquistar a un hombre, el cual estaba en compañía de su esposa. Cuando ella se paró de la esa para ir al baño, él se me acercó y me dijo que le parecía muy hermosa, yo lo tomé de la mano y le dije que anoté mi número porque a mi también me había gustado. Así lo hizo y sin perder tiempo ayer en la noche me escribió diciéndome que no podía dejar de pensar en mi, entonces tuvimos una conversación muy sexual, yo estaba tan excitada que culié con mi esposo y cuando él se quedó dormido, mi nuevo amante me preguntó si podíamos vernos el dïa de mañana, o sea hoy. Le dije que si pero que tiene que ser bien temprano, luego de que mi esposo se vaya a trabajar. Y así lo hizo, hoy en la mañana mi esposo se fue muy temprano al trabajo y no me culió, por lo que Alvaro, mi nuevo amante, fue mi primera verga del día de hoy. Estuvo bien temperando en mi casa, yo estaba tan excitada que no perdí tiempo y lo recibí desnuda, sin importarme si alguien me veía al pasar por afuera de mi casa.

Cuando abrí la puerta, Álvaro se quedó sin palabras y así son de ir nada, me besó en la boca mientras me apretada el culo con sus manos, cerré la puerta y entramos a la sala, él se comenzó a desnudar y me regaló un espectáculo, una verga media parada pero con un tamaño que cualquier verga bien parada las quisiera tener. Yo me lancé sobre su verga para mamarla, no había visto algo así anteriormente y por más que le mamaba, no lograba que se ponga bien dura. Me dijo que me ponga en cuatro, yo tenía la vagina empapada de flujos y él comenzó a meterme la verga que no estaba muy parada pero igual se sentía bien rico y a los poco minutos de que me metía y me sacaba, su verga ya estaba completamente parada adentro de mi vagina, al principio no me la metía toda pero yo tuve dos orgasmos, después me la comenzó a meter toda, me dolía bastante, mi vagina es bien amplia en ancho y fondo por tanta berga que me meto pero aún así quedó corta y estrecha para el tamaño de la verga de Álvaro. Pero luego se me fue el dolor y comencé a gemir como loca.

Asi estuve un buen tiempo y de pronto Álvaro sacó su Vega de mi vagina y me dijo que quería verme masturbandome, yo abrí mis piernas y me comencé a acariciar el clitoris desenfrenadamente mientras él se pajeaba viéndome, tuve una orgasmo tan rico que me chorreaban los flujos hacia el año. Grité entre gemidos y Alvaro me dijo “acaríciate las tetas puta”. Cerré los ojos y sentía que me iba a arrancar los pezones y escuché la voz de Alvaro diciéndome que me iba a llenar la vagina de semen para que me acuerde de él. Yo tenía las piernas bien abiertas y él muy despacio me comenzó a meter la verga, hasta que tocó el fondo y comenzó a culiarle bien duro, yo grité tanto de la excitación y de los orgasmos que cuando sentí que me desmayaba cuando me llenó de semen la vagina, su carga fue tan grande que que se me salía de la vagina. Cuando sacó su verga, él me limpiaba el semen que se salía y con sus manos embarradas de semen, me metía los dedos en la boca.

Me dijo que tenía que irse y que me culiaría cuando yo quisiera.

Estoy contenta de lan ueva verga que tengo para mi. Me voy a masturbar acordándome de Alvaro hasta que vuelva a culiar con él. Hoy también culiaré con mi hijo menor. Espero que les haya gustado este relato que es real.