Putita p2

Mi loca vida sexual .
Anteriormente conté como un compañero de clase me metió en el mundo sexual, con solo tocarme a los 10 años, y como mi padrastro me coló los dedos.

Luego de descubrir el porno mi vida cambio, solo podría esperar a que llegara el fin de semana, para estar sola, ya que mi madre trabajaba de mañana tanto sábado como domingo, por lo cual podía explorar como yo quería con mi cuerpo.

Seguí colandome los dedos como los vídeos, pero eso ya no era necesario quería más, solo pude llegar a meterme 4 dedos ya que al quinto me dolía, pero nunca pare de intentar, mientras me bañaba probaba con el mango del cepillo de dientes, que si se sentía rico pero no tanto.

Un sábado me desperté muy contenta ya que el día anterior había sido mi cumpleaños y me habían regalado muchas cosas, una de esas era un nuevo desodorante el cual no era tan grande, pero era muy largo, de unos 16cm, mi mente al verlo vendo directamente en los hermosos penes que veía en el porno, por lo que aproveche que estaba sola y me saque las ganas.

Agarre ese hermoso desodorante y lo chupe, imaginando me que era el hermoso pene de mi adorable primo, el cual me había empezado a llamar la atención no hace mucho, el me llevaba unos 7 años, y chupe como veía en los vídeos, sintiéndome una estrella porno, cuando me sentí lista me saque la ropa interior, y metí dos dedos, cuando sentí que estaba bien mojadita, porque había investigado sobre la lubricación y eso, fui metiendo poco a poco ese grande y largo desodorante.

Al principio me costó y mucho, ya que me dolía, pero había leído que después del dolor se sentía rico, por lo que seguí intentando, hasta que entró, y sentí muchísimo dolor, pero me aguante, lo movi muy lento hasta que poco a poco el dolor paso, y se sintió muy rico, por lo que acelere los movimientos y tuve mi hermoso orgasmo.

Cuando saque el desodorante me di cuenta de que tenía sangre, ya que había roto el himen que tan puro tenía.

En ese momento escucho que tocan la puerta de mi casa, yo rápido me vestí, y al abrir está mi vecino, el señor Rodrigo, un señor de unos 35, alto y morocho.

El mismo me dijo si podía pasar que tenía que hablar algo muy importante conmigo, yo toda inocente lo deje entrar, cuando paso me pidió que nos sentamos en el sillón, yo al momento de sentarme sentí mi conchita muy sensible, por lo que sin querer solté un gemido.

El me preguntó si estaba bien, a lo que le respondí que si y que era lo que quería decirme.

El me comentó que había visto por mi ventana la escena que estaba haciendo con mi desodorante, y yo me puse pálida, no sabía dónde meterme, le Rogue que no dijiera nada.

El me dijo que no diría nada si cerraba los ojos, yo claro inocente lo hice, al segundo de haber cerrado los ojos, sentí su mano tapar mi boca, y recostarme contra su pecho a la vez que sentí sus manos recorrer mis muslos, por lo que nerviosa abrí los ojos.

Lo vi asercar si mano a mi ropa interior y yo todavía sigo sin saber por qué, pero me deje, deje que sacará mi calzón y que me tocará, recuerdo sus manos separar mís labios, y sin juegos previos, solo saco su mano de mi boca y me iso chupar sus cinco dedos uno por uno, cuando los tenía bien mojados, sin previo aviso me metió dos, me sentía en la gloria, por lo que solté un gran gemido, el con miedo a que nos escucharon los vecinos me volvio a tapar la boca, y introducio otro dedo…

Continuará