Mi luna de miel inolvidable
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola mi nombre es Bertha, tengo cuarenta años, bien vividos diría yo. Soy menudita buen culo, redondo y paradito. Buenas Tetas, talla 38b. Acinturada y aun hoy en día escucho piropos. Hace tiempo tengo el deseo de escribir algo de mi que me paso la noche de mi boda. Esto porque con el internet y el que mi marido entra en paginas porno, he estado viendo videos y leyendo relatos de sexo de varios temas.
Sucede que mi marido es y era muy caliente, el fue el que me enseño y adormilo en cosas de sexo. Antes de conocerlo era yo mas seria en este tema, por la educación que le dan de familia a una.
Cuando lo conocí al principio se porto muy precavido pero con el paso del tiempo se volvió un diablo. Aprendí con el cosas que no sabia o por lo menos las oía en boca de algunas amigas, como la masturbación, el sexo oral….antes de conocerlo tuve un novio llamado Mario el cual cuando nos veíamos me abrazaba y acariciaba ardientemente, su pito lo sentía duro como palo de escoba por delante y por atrás, claro esta que con ropa. En fin me dejaba toda mojada, pero lograba quitármelo de encima con algún pretexto. Me gustaba mucho pero luego llegaba a verme y luego no. Total que un día ya no volvió, quizá por mi manera de ser…
Juan apareció, no es muy guapo pero tiene algo que llamo mi atención, sus ojos tristes. Él fue paso a paso despertando en mis deseos ardientes de tener sexo. Pero aquí viene lo bueno: al principio no entendí su plan para conmigo hasta que sucedió el suceso ardiente e inesperado.
Cuando nos veíamos me abrazaba y toqueteaba, muchas de las veces me dejo bien caliente y escurriendo mi entrepierna, yo le pedía mas…mas. Pero luego se retiraba y dejaba de ir a verme entresemana hasta el día sábado. Esos días sin verlo se me hacían eternos, en las noches soñaba con el acariciándome, besándome y despertaba toda agitada. Un sábado me acaricio como nunca y aprovecho el momento para decirme: quiero pedirte algo que hagas cuando estés sola.
Dime conteste, cuando no venga cuando estés en tu recamara quiero que hagas esto: metió su mano dentro de mi pantaletas y comenzó a acariciarme mi pucha, la sobaba de arriba abajo, mi clítoris recibía oleadas de placer y mi vagina se lubricaba, luego metió un dedo…dos….y me los daba a probar, fue así como supe el sabor de mis jugos. Quiero que hagas esto pensando en mi…..piensa en esta verga……tomo mi mano y la coloco en ella….estaba gruesa y caliente, ya no sentí ese temor como con Mario. Pero de repente se detuvo y dijo: ya me voy, se me hace tarde, nos acomodamos la ropa y con un beso se marcho. Entre a mi recamara aun caliente no entendía su proceder.
Esto se repitió varias veces, y en otras ocasiones me pedía ir con vestido amplio a nuestras entrevistas, así conocí el sexo oral, es tan rico y destresante ante, pero además conocí lo que llaman el beso negro, sus labios y lengua recorrieron mi pucha hasta llegar a mi culo, pues me ponía doblada y abierta de pies en algunos lugares solitarios. Yo ya me moría de ganas de que me la metiera pero de esto no pasaba.
Así pasaron días con estas lecciones, luego una noche me pido que ahora si tendría un adelanto. Me hizo hacerle sexo oral la primera vez no me gusto aunado a que no sabia como hacerlo, pero también supo guiarme poco a poco, hasta que aprendí.
Una noche al tenerme caliente me pregunto: Bertha verdad que has tenido varios novios antes que yo? Si, conteste. Y quien de ellos, te ha gustado más. Porque me preguntas eso? Contéstame por favor, respondió con voz firme. Uno que se llama Mario, conteste. Y te gustaría volver a verlo? No se, creo que no, ahora te tengo a ti, tu me has enseñado cosas que no sabia, te quiero y deseo ser tuya. Aun no es el tiempo, ya llegara, dijo. Con esta afirmación mía, se valió para seguir con su plan que tenia en mente. Fueron noches de toqueteos y sexo oral. Muchas también me masturbe a solas en mi cuarto, mi mente y mi cuerpo ya solo eran para el.
Después decidimos casarnos, tres semana antes de la boda no me toco para nada, parecíamos simplemente amigos y no dos enamorados que van a casarse. Yo deseaba ardientemente besarlo, tocarlo…..que me besara, que me tocara y que me hiciera sexo oral, sentir su aliento y lengua en mi agujerito del culo……….me moría de ganas.
Dos noche antes, no pude aguantarme y le reclame su actitud, que te pasa? He hecho algo que no te gusto, porque ya no me tocas. Así, contesto, poniendo su mano derecha en mi puchita, que al sentirla sentí un chispazo recorrer mi espalda. Si así, dije. Se detuvo y dijo: voy a hacerte un regalo muy especial de bodas, ahora que en estos meses has aprendido a relajarte sexualmente, falta titularte y que mejor que pasado mañana en nuestra noche de bodas. Sabes, busque a tu ex que te ha gustado más y va a venir a tu boda como Invitado Especial. Quiero que lo atiendas como tal. Y me dejo con muchas ganas.
Por fin llego el día, el ritual del casamiento por lo civil, por la iglesia y por ultimo la fiesta donde hubo, comida, vino, música….Juan llevo a Mario a donde estaba yo con algunas amigas departiendo. Bertha mira quien llego. Ahí estaba Mario con su porte varonil, muy guapo, al saludarme sentí un apretón mas de lo normal, se había puesto el perfume que me gustaba cuando nos veíamos. Hola Bertha, felicidades.
Gracias, conteste. Cuanto tiempo sin vernos. Si, verdad? Pasa ven y siéntate a tomar algo. El dejo un rato voy a atender a algunos invitados, dijo Juan. Atiéndelo en todo. Si, no te preocupes, conteste. Llego el mesero llevando unas copas, tomo una y ofreciéndome otra sonriendo dijo: salud Bertha, porque todos tus sueños se cumplan, salud Mario.
Así estuvimos un rato charlando ahí me entere que todavía seguía soltero, después tuve que atender a algunos invitados también, pero al percatarse Juan rápido me decía: no dejes solo a Mario, recuerda hoy vas a titularte sexualmente y disimuladamente me apretada el trasero y volví con Mario. Ya con algunas copas de más me sentí mareada y alegre. Comenzó el baile y fui bailando con algunos invitados, al tocarle el turno a Mario ya no me dejo bailar con algún otro mas.
Al compas del baile nos fuimos tocando y atrayendo mas, hasta sentir su aliento caliente en mi cuello. Yo me sentía atraída por el y creo que lo noto, pues me dijo: todavía me recuerdas verdad? No se te ha olvidado esto, y repegándome a el sentí una vez mas su verga dura como metal, picándome la ingle.
Mario…..Mario….que rico, dije. Bertha esta noche vas a hacer mía y probaras esta verga dura y gruesa………..Los días anteriores sin nada de nada con Juan, me nublaron los sentidos y dije: que dices? estas loco. No me dejo apartarme de el, sentí un calorcito recorrer mi entrepierna hasta topar en mi pucha. Llamo a un mesero y tomando una copa me la ofreció, tomamos de ella hasta terminarla. Luego sentí ganas de ir al baño, debo decirles que la fiesta fue en una casa de campo de mis suegros, es amplia y acogedora. Llegue al baño pero había mucha gente, subí a la planta alta y me metí al baño de la recamara principal. Me senté y estuve orinando, descansando un poco también, me limpie y cuando salía ahí estaba Mario imponente y seguro de lo que buscaba.
Todavía con los humos del alcohol nublándome los sentidos no supe que hacer. Me abrazo y comenzó a besarme, como el solo sabe hacerlo, el fue el que me enseño a besar. Yo me deje hacer, mi pucha reclamaba el placer que Juan me lo negó durante tres semanas antes. Sus manos como tentáculos recorrían mi cuerpo ardiente, ya no me importo nada, deseaba calmar mi sed de sexo y que mejor que Mario, guapo y ardiente.
En un momento quede desnuda, me tomo entre sus brazos y fui a dar a la cama, boca arriba, Mario se desnudo aprisa, entonces pude contemplar su verga por primera vez, media como 20 cms, mas gruesa del tallo, roja amoratada con unas venas que parecían romperse, era hermosa, la de Juan varia en grosor, es mas delgada pero también dura, Mira Bertha, mira lo que te vas a comer…..se subió y comenzó a besarme de los pies a la cabeza, deteniéndose en mis pechos para succionarlos, luego en mi pucha para lamerme y chuparme, jugueteando con mi clítoris, sentía escalofríos recorrerme toda para terminar en mi vagina. Me volteo he hizo lo mismo, deteniéndose en la abertura de mi cola, chupando y besando todo mi culo y mi chiquito.
Ya Juan…Ya….métemela…….inconscientemente murmure. Calmada Bertha después sigue el…Que? Acaso están de acuerdo el y tu? Si, el quiere que yo sea tu regalo nupcial y así titularte sexualmente. Mi pucha rezumbaba de gusto al oírlo, iba a tener dos vergas esa noche, dedicadas para mi solita.
Entonces hazme tuya Mario, quiero ser tuya hazme lo que quieras. Lo puse de espaldas y chupe su verga, ya destilaba miel, la sentía bien dura y venosa, no pude aguantar mas y me subí en ella, mis jugos apaciguaron el dolor de ser virgen y me comí paso a paso su verga hasta sentir sus bolas chocar con mi cola…..Así Bertha….cométela….siéntela es tuya…..solo tuya.
Ya pasado el momento empecé a moverme locamente, en círculos, de atrás pa adelante y viceversa, mis jugos bañaban la ingle de Mario y me vine en un orgasmo fenomenal…..MMMMMMMMMMMMaaaaaaaaaaaaarrrrrriiiiiiiioooooo…………amor cuanto tiempo he deseado este momento…………que rico…….ricoooooooooooooooo. después desfallecida me tumbe junto a el, su verga seguía firme como me gustan, entonces me tomo de las piernas y las puso en sus hombros y me la dejo ir de un solo golpe, se movió y se movió, arrancándome quejidos de pasión…..Mario…Mario….te siento muy adentro….métela……métela….Toma Bertha, toma….es tuya mamacita…tuya…..Me quemas Bertha…me quemas….tienes la pucha muy caliente, esta caliente para ti y Juan, conteste.
Así estuvo un rato hasta que no pudo más y me lleno de leche mi vagina, era el bálsamo para mi sed interior. Se dejo caer junto a mi y lo colme de besos, limpie su verga con mi boca y esto la puso dura nuevamente, fue entonces que ordeno ponte empinada aquí en la orilla, me puse y beso succionado su semen y mis jugos, parte de ellos fueron a parar al agujero de mi culo, con la lengua picoteaba mi chiquito haciendo que se dilatara, me colmo de besos mi trasero, luego sentí la punta de su verga hacer presión en mi chiquito, con los jugos que aun escurrían de mi pucha los tomaba con los dedos y los dejaba caer en mi chiquito, esto ayudo y yo con las ganas afloje mis músculos, sentí entrar la cabeza poco a poco, un pequeño dolor acompaño la inserción se detuvo un rato para luego reanudar la embestida hasta sentir sus bolas chocar en mi pucha, se detuvo aun ahí un rato para acostumbrarme a su verga…luego yo misma lo incite a meterlo y a sacarlo, el dolor fue desapareciendo hasta convertirse en delirio….sácala y métela Mario….que rico….uuuhhhhmmmmm…se siento rico también por ahí……sentir un fierro caliente y venudo por ahí es muy placentero y mas cuando ya se acostumbra. Bertha que rico culo tienes…siempre me ha gustado tu culo y mas cuando ya me lo diste a probar,, lo siento apretadito y caliente………..caliente…..me vengo,,,,,me vengo…………Y sentí su semen en abundancia en mi recto…poco a poco su verga fue ablandeciéndose y se salió de mi agujerito.
Nos recostamos los dos y nos colmamos de caricias y besos, entrelazando nuestros cuerpos………..Bravo…Bravo….Bravo…sonó una voz conocida: era Juan, que aplaudía repetidamente…..estaba a medio vestir, me levante y fui con el, gracias Juan…gracias. Aséate y cámbiate nos vamos de luna de miel, dijo mientras me beso ardientemente. Dándome una palmada en mí colita. Los dejo voy a bañarme, les dije. Si anda, ve.
Me metí a bañarme, cuando Salí no estaba Mario, ya se había marchado. Estas triste porque se fue? Para serte sincera si. No estes triste el va a acompañarnos, entre los dos vamos a atenderte en tu luna de miel.
Y esa fue la luna de miel inolvidable, que creo que a muy pocas, o quizá ninguna halla tenido.
Bertha…..
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