Ultimos Relatos






La historia de como a mis 25 años disfrute de las hijas menores de los campesinos de mi pueblo, de 14 hasta 18 años, me revolque con toda muchachita que me cruzara.






—Mira como estás, puta, mojada como una salamandra. ¿Quieres verga? ¿Esto es lo que quieres, eh? —preguntó sacudiéndose la verga frente a ella y luego dándole golpecitos por toda la cara con ella—. ¿Dime? ¿Quieres ésta verga? —Sí, quiero su verga, señor —respondió Daniela, dócil como un cordero..






El lugar estaba lleno a reventar a pesar del aspecto y el mal olor, pero al entrar las cinco zorras se quedó todo en silencio y se suspendió el tiempo, hasta que alguien en el fondo gritó: —¡Llegaron las zorritas del Centeno! .






Sin amigos, inocente y fácil de manipular, Daniela pasó su primer día de clases haciendo lo posible por pasar desapercibida, pero su brillante mente la hizo sobresalir en clases, eso y su cuerpo. .












Eran 2 semanas en las que se supone estaría solo, pero quize buscar una satisfactoria compañía .






Esta es la historia de mi mama Anita y sus comienzos en el incesto.












Gemi en voz alta sintiendo ese pedazo de carne en mi interior, era diferente que con mi padrastro, con el era como tener una calidez reconfortante alojarse en mi ano, con mi abuelo se sentía como un pedazo de carne caliente que hacía sudar mis paredes internas..






De como me enamore de una chica algo mayor que yo, y decidimos vivir juntos……el tema es que ella venía con un agregado, su hijito.






No responde, pero se deja acariciar, recorro su cuerpo de arriba abajo, rozando suavemente sus partes más íntimas. .






El “aprete” a Gloria da resultado y me entero de cosas que nunca hubiera querido saber. La extorsión de las lesbianas me revolvió el estómago y decido arruinarle la ceremonia de casamiento a Jacinto y a la puta reventada de Esmeralda. Se me soluciona un posible problema y me surge otro u otros en .






Esta es la continuación de mi primer relato «Mi proceso hasta la desvirgación…» en donde os contare como accedi a que quien me desvirgo me adiestrara en la cama..






Sus belfos se ampliaron con los míos dejando que su lengua penetrara en mi boca, podía sentir el recorrido que me hacía mientras apretaba mi cuerpo, el tío Hector terminó de desnudarse acercándose, mientras mis manos se sostenían de los hombros de Aldred, Hector se inclino abriendo mis nalgas..






Mi abuelo abrió mis nalgas dejando al descubierto mi entrada rosada, metió un dedo notando el fácil acceso que tenía, hizo lo mismo con otro maravillado por como me los tragaba sin problemas. «La tienes bien abierta putito, tu padre te ha usado bien» halago..