Sofía Ardiente Volcancito, Cap. 10
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por sexigaleno.
Que tal mí distinguida comunidad reciban un cordial y afectuoso saludo desde el hermano país de Italia, lugar donde me encuentro en estos momentos de escribir, este último capítulo de la saga del relato de mí pequeña, cariñosa, lindísima y estimada Sofía, a la cual estimo de una manera muy especial y a la que con gusto le confecciono sus pocas vivencias de su corta edad.
Cómo se han de dar cuenta mi amables lectores, qué en la saga del relato aparece un elemento femenino más y reaparece otro similar de otro relato; bien lo que pasa que hasta estas fechas se han compenetrado tanto entre ellas, por sus edades y gustos, además que ellas se conocieron desde parvulitas en la etapa de kínder y posterior en la primaria, donde interactuaron siempre juntas sus juegos, tareas y hasta los desayunos en horas de recreo, y obvio las enseñanzas que don José les dio a cada una, en esas edades de capullos en flor naciente, el destino las separó, pero el tiempo fue relativamente corto, para que se volvieran a reencontrar y hasta estos días que escribo mantienen una unión, casi de consanguineidad, ya que entre las tres pequeñas mujercitas se cuidan, se protegen y se han hecho muy responsables, tanto en los estudios que llevan hasta el momento, así como al cuidado que le brindan a su protector y guía don José, quien adora a las chicas y las cuida, como si fueran sus hijas, hago este comentario, para que no queden confundidos por los hechos relatados en el que fue el transcurrir de cada uno de los episodios que, con este llega a su fin de la manera siguiente:
“””Un flashazo del relato anterior”””
Posterior a una noche intensa de “jueguitos intensos” que disfrutaron, por un lado don José con Sofía y Aleida y por el otro horizonte S-g.
, con Sandra, mismos que con lo propio de la excitación y de los encuentros, llevaron a Sandra a ser desvirgada analmente por su pa’ s-g.
pasado del mediodía de sábado, estos dos últimos personajes salieron de casa, para ir a comer y planear la salida a otro país, ya que sería en dos días posteriores, después de esa comida se fueron a la casa de don José, para que Sandrita preparara un pequeña maleta con ropa la necesaria, para llegar a Europa, ya que allá, S-g, le compraría lo necesario, para no ir cargados de equipaje, don José y S-g.
, se tomaron unos whiskies y brindaron por una buena estancia temporal en ese país, mientras Aleida ayudaba a Sandra a hacer la maleta de viaje y Sofía atendía a su papi José y a su pa’ G.
, con las bebidas y un entre-mes de carnes frías que ella les preparó en ese momento, el cual degustaron los cinco personajes, una vez terminado ese brindis, se despidieron, pero antes de irse de manera muy efusiva Aleida y Sofía abrazaron a Sandra, quien sería la viajera y por unos minutos se dieron a una pequeña, pero muy caliente platica de esta manera:
Al.
–
–
–
Oye manita, ¡no se te olvide comprarme la cámara que te dije, eh!
Sa.
–
–
–
No, ya llevo la lista de Sofía y la tuya, de allá nos estaremos comunicando, para que sepan cómo estamos en ese país, y ustedes se portan bien y cuidas tu Aleida la casa de pa´ G.
, creó que se va a ir a quedar contigo la hija de una compañera de trabajo de pa’ G.
, para que no te estés sola.
So.
–
–
–
Ya vez Aleida y tu pensando que ibas a estar solita en ese caserón de pa’ G.
, bueno de todas formas mi papi José y yo te vamos a dar tus vueltas.
Sa.
–
–
–
Sí la chica se llama Tania.
, es blanquita de ojos aceitunados y bien fresilla, ya la conocí, es una pacientita de mi pa’ G.
, y tiene 11 años, ella ya no va a ir a la escuela, ya que se acabó su año escolar y regresará hasta finales de agosto igual que nosotras.
Al.
–
–
–
Uy que bien, entonces no estaré solita después de clases, ya tendré con quien salir en la motocicleta a comprar para comer y ¿¿¿pues, para otras cosas???
Sa.
–
–
–
¿Cómo qué otras cosas?, ¡te pasas Aleida, es niña, no te manches!, no sabemos qué onda con ella, sólo cuídense y ya, nos vemos, ¡ya está pa’ g, en la puerta despidiéndose de papi José!, haber abracitos y besitos a las dos.
Al.
–
–
–
Aja, ¡venga a mis brazos mi peque-putita!, y tenga mis salivosos besos, ahh, mmmm, para que sientas que te amamos aquí en México.
Sa.
–
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Ayyy, no mam.
.
.
, ¡que me duele la cola, no me agarres de ahí!, ayyy, que brusca eres Aleida, uff hasta me ardió la acariciada que le diste a mi anito, con tu dedo, bueno bye.
So.
–
–
–
¿No me digas que te rompió el culo pa’ G.
, anoche?, te forzó o tú te diste manita, ¡cuenta!
Sa.
–
–
–
No, ya me voy, luego les platico bien, pero rápido les digo, yo me entregué de mi culito a pa’ G.
, bye.
Ya de camino Sandra y S-g.
, pasaron a hacer compras a un supermercado de lo necesario, para que no tuviera problemas Aleida y Tania, para comer en los siguientes días, pasaron a un cajero a retirar dinero y ponerlo en un sobre, para los imprevistos y pagos de servicios que realizaría Aleida junto con Tania, por las tardes, esa noche de sábado durmieron S-g y Sandra como si fueran marido y mujer ya que saldrían a temprana hora a la capital de la república, para abordar el avión que los llevaría a Los Ángeles Cal.
, y de ahí transbordar por la noche el vuelo hacía Italia; a las 6:00 am, del día siguiente, ya estaba don José y Sofía, para trasladarlos al aeropuerto, mientras Aleida se quedaba en casa y esperaba la llegada de Tania, en el transcurso del día, cómo se había planeado.
De regreso de dejar a S-g y a Sandrita en el aeropuerto, don José y su “niña” Sofía, se la llevó de shopping en la capital en una de esa plazas importantes del sur de México, en ese lugar cenaron y cerca de la media noche emprendieron el regreso a su ciudad de origen, la chiquilla contenta de las compras de ropa, calzado y mucha lencería así cómo corsetería y otras cosas que compartiría con Aleida, ya en casa de retorno solos y cansados por el viaje, don José se sentó a ver un poco la tv las noticias matutinas de las 6 am, mientras Sofía se probaba sus prendas y se paseaba delante de él, para que se las viera puestas, entre tanta ropita sensual Sofía se puso un baby doll que le quedaba como si fuera una muñeca de aparador, ya que estaba a la perfección la prenda tanto en el color pastel, mismo que le acentuaba al tono de su piel, así como su bikini blanco lleno de moñitos y boquitas estampados, y unas zapatillas altas de plataforma, pero de las de vestir, no de taibolera, así como estaba vestida, le preparó un café y se dispuso a hacer el desayuno para los dos, don José observaba que su niña cada día se veía más hermosa, ya su niñez iba quedando atrás día a día, pero sus rasgos infantiles aún los conservaba sus manos se iban estilizando más, su caminar ya comenzaba a ser la de una adolecente, pero aun así, era niña ya que le gustaba jugar todavía con sus peluches, su casa de muñecas que don José le compró una navidad, sus múltiples muñecas que formadas las tenía en un juguetero de su recamara, era una mujercita-niña y hasta la fecha es muy infantil de pensamiento, pero muy inteligente en la escuela, en sus obligaciones que desde los 11 años hace, y que don José le aplaude y la motiva.
Después de desayunar ambos y desvelados del viaje de retorno a casa, don José se fue a acostar, enseguida lo alcanzó Sofía y se acurrucó a su lado adoptando la posición de cucharita y poner sus nalguitas en el paquete de su papi José, que al sentir el calor que emana de esa parte exquisita, pues de inmediato sintió un corrientazo de erección por la cercanía de esas partes de ambos, con una suavidad imperceptible Sofía movía su cadera y a la vez se pegaba más al pene cubierto por el calzón de José, quien lentamente lo bajo y se volvió a acomodar, para que su niña se siguiera dando gusto y frotándose ya más libre de los interiores de él, para abrazarla por su cinturita y jalarla más hacía su pene que ya en esos momentos ya le brotaba el precum de la excitación, para hacer a un lado de una nalguita de Sofía el bikinito nuevo de moñitos y boquitas, y acomodarle el glande en ese pequeño agujerito inviolado de niña, al cual comenzó a presentárselo y empujar muy suave y delicadamente, haciendo que Sofía comenzara a abrir su boca y soltar unos pujiditos muy dulces y unos imperceptibles gemiditos que sólo y ella y él los escuchaban:
So.
–
–
–
Ahhhhh, papi, ahhh, ¿qué me vas a hacer papi?, no seas brusco conmigo, soy tu niña ahh,
¿No me vayas a hacer llorar?, ayy, ayyyy, duelee, ayyyy, duelee, no fuerte ayyy, ayyyyyyy
Jo.
–
–
–
Mmmm, que delicioso calorcito me das en la punta de tu “comidita” ahhh, ¿quieres que te meta un poquito?
So.
–
–
–
Ayyyyy, ayyyyyyy, pero papi, ¡nunca me los has metido ahí!, me va a hacer doler, y voy a llorar, ayyy, no, papi, nooo, ayyyyyy, me lastimas, ayyyyyyy, ayyyyyyyyyyy, ayyyyyyyyyyy
Jo.
–
–
–
Ahhhh, ¡qué apretado tienes el anito Sofía!, ¿te acuerdas cuando te lo metí un poquito, la madrugada que Sandrita estaba escuchando tras la puerta?
So.
–
–
–
Ayyy, siiii, me acuerdo, pero también me dolió, ayyy, no lo hagas papi, noooo, déjalo entre mis nalguitas, ¡mastúrbate con ellas nada más!, pero no lo metas, ¡yo lloro eh!, auchhh, ahh Ayyyyyyyyyyy, no papi, no seas bruto me haces doler mucho, ayyyy, ayyyyyyyyyyy
Jo.
–
–
–
Ahhh, es que te duele más ahora, porque no le puse lubricante cómo esa vez, ¡pero aquí está mira!, le voy a poner a tu colita bien bonito, y me unto yo en la cabecita y vas a ver qué vas a aguantar bien, ¡tú quédate tranquila y levanta la colita bien!, ahhhhh, ahhhhhhhhhhh
So.
–
–
–
Ahhhh, ¿papi, no me vayas a lastimar eh?, nada más mete un poquito como esa vez, ayyy papi, hazlo despacio, soy muy sensible al dolor, tú sabes que lloro ayyy, ayyyy, ayyyyyyy
Jo.
–
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–
Sí ya lo sé hija, que eres muy chillona, por todo, pero es que mira como lo tengo de parado y quiero entrar un poquito en ese hoyuelo que parece que me guiña a invitarme a penetrarlo, ahhh, tu aflójate y no te aprietes, deja que yo te lo meta despacito, ¡nada más la puntita!, ahhhhhh
So.
–
–
–
Ayyyy, papi despacitooooooo, ayyyyy, ayyyyyyyyyyy, no fuerte, uyyy, que dolor, ayyyyyy, me estas abriendo muchooo, ayyyyyyyyyyy, para, papi, para, paraa, paraaa, ahh, ayyyyyyy, ¿dijiste que nada más la puntita?
Jo.
–
–
–
Ahhh, que rico calorcito le pasas a mi pene, ahhhh, ahhhhhhhhh, con lo estrechito, chiquito y apretado, ¡ese es mi culito de nena!, ahhhh, aguanta hija, ya está donde lo metí esa vez.
So.
–
–
–
Ayyyy, papi, no’ masss, ayyyy, ya quédate ahí no lo muevas, duele, ayyyy, ayyyy, auchhh, me estas matando papi, me dueleeee, ayyyy, ayyyyyyy, ¡ya no, salte de mí colitaaa!, ayyyyy
Jo.
–
–
–
Ahhh, ¡no quédate quieta y no trates de zafarte!, porqué te va a doler más, ahhh, ahhhhh que rico me lo aprietas Sofía, ahhh, ya entro bien mi cabezota en tu hoyuelito aaaammm
So.
–
–
–
Ayyyy, que dolor, ya,,, noooo,,, más, papi, ya no masss, no aguanto tu coso, ayyy, ayyyy, duele, duele, ayyy, me estás haciendo llorar, ayyy, ayyyyyyyyyyy, buu, buuu, ¡mi colita!, buu, papi eres malo, buuuuu, te aprovechas que estamos solitos, buuuu, buuuuu, dueleeee.
Jo.
–
–
–
Vas a ver qué pasa e dolor pronto, tu quédate quietita hija, ahhh, ahhhhhhhhh, ¡si no te mueves, no duele!, ahhhh, mira siente con tu manita, entró más que esa vez anterior ahhh
So.
–
–
–
Ah, pues sí, pero me duele papi, no seas malito, me rompes mi cola, ayyy, ya no lo metas más, siéntete tu cómo lo tienes de gruesote y mira siénteme mi colita, cómo la abriste, ¿a ver si no me desgarraste?, ayyy, ayyyyyy, ya no lo empujes más, ayyy, ayyyyyyy, ayyyyyyyy
Jo.
–
–
–
Otro pedacito mamita, y ya me quedo quieto, ahhhh, aguantaaaa, ahhhhhhh, ahhhhhhhh, ya entro más, ahhh, ahhhhhhhh, ya falta poco para que este todo adentro de tu culito, ah
So.
–
–
–
Aaaaauuuuummmmmmm, nooooooooooo, papiiiiiiiiiii, ahhhhrrrrrggggg, auuuuummmmm
Ya me partiste mi colita, aayyyyyyyyyyyyyyyy, ayyyyyyyyyyy, aarrrrrgggggggggg, aaarrrggg
Jo.
–
–
–
No hija, ahhh, ¡todavía te falta un buen pedazo de comerte!, ahhhh, ahhhhh, que calor me das en el pito, ahhhh, ahhhhh, y que apretones le das, ahhhh, ahhhhhhhh, sigueeee, siguee
So.
–
–
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Ayyyyyyyyy, nooooooo, ya nooooo, ayyyyyyyy, ¿dijiste que nada más la puntita?, ¿quieres dejarme con dolor de culito como a Sandra?, que se fue a Italia, con dolores de ahí, ayyyy, eso quieres, ayyyyyyyyy, ¿verdad?, ¡no me voy a poder ni sentar!, ayyyy, ayyyyyyyyy, ayyyyy
Jo.
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Ahhhhh, ¿cómo dices?, que se fue adolorida de la cola, ¿Qué pasó?, se cayó, dime ahhhhh
So.
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Ayyyy, nooo, ¡es que le dio el culito a pa’ G!, el fin de semana, y estaba como yo, virgen de la colita, y se fue adolorida con él, es lo que nos dijo a Aleida y a mí, ayyyyy, ayyyyyyyyyyy
Jo.
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A, cabrón medicucho de mierda, no me dijo nada, ahhhh, tu sígueme apretando el pito, ahhh, ahhhhh, ¿ya se te está pasando el dolor?, ahhhhhhhhhhh, ahhhhhhhhhhhh
So.
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Sí papi, pero lo siento muy abierto mi culito, ayyy, ayyyy, ¿vas a metérmelo todo?, ayyyy, ¡ya deje de llorar papi!, sólo duele, ayyyy, ayyyyyyyyy, ¡tú nena no quiere que lo metas más!, ¡tú nena quiere lechita en la colita! Ayyy, ayyyyyyyyy, no papi, nooo, noooooooooo
Jo.
–
–
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Sí ya lo tienes todo dentro de ti, ahhhh, ahhhhhhhhhhh, que rico, ahhhhhhh, ¡no te muevas!, te vas a lastimar ahhhhh, ahhhhhhhhh, yo me quedo dentro de ti quieto, ahhh
So.
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–
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Aaarrrrrrrrrrrrrrrggggmmmmmmm, ayyyyyyyyyyymmmmmm, mmmggggrr, auummmmgg, me rompiste toda, papiiii, ayyyyyyyy, ayyyyyyyyy, que dolor, ayyyyyyy, ayyyyyyyyyy, ayyy
Jo.
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–
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Siiii, toda te la comiste en el culito, ahhh, ahhhhhh, ahhhhhhhhhh, así nos vamos a quedar pegaditos y quietos los dos, ahhhhh, nada de moverse eh, ahhhh, vamos a estar unidos, ahhhhhh un buen ratito, ahhhhh, ahhhhhhhhhh, cuando se te pasé el dolorcito me dices, ahhhh, mientras platícame lo de Sandra que le rompió el culo S-g, ahhh, ahhhhhhhhhhhhh
So.
–
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Aummmm, ayyy, ayyy, sí eso nos dijo, ayy, ayyy, que pa’ g, le hizo eso que me estás haciendo ahora, ayyy, y que se iba con dolor de colita a Europa, ¡pero que ella quería que le diera por atrás!, eso es lo único que nos dijo, ayyyy, ayyyyyy, ¡no me lo hinches adentro papi!, siento que me lo expandes más mi culito, ayy, ayyyyyyyy, pero nos hablará de allá y nos dirá ¡cómo pasó eso!, ayyyyyy, nooo te muevas papi, ayyyyy, ayyyyy, ayyyyyy
Jo.
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–
Pues sí, sería bueno que te contara cómo sucedió eso que me dices ahora, ahhhh, ahhhhh, me excita lo que me dices, ahhhh, ahhhhhh, ¿lloraría Sandrita, porque le rompieron su culito?, ahh, ¡cómo tú lo haces!, ahhhh, me siento votarte la lechita, ¿ya la quieres?, ahhhh
So.
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Ahh, ahhhh, ¿Quién sabe?, ¡yo sí lloré me lastimaste mucho! y me sigues lastimando, ¡hasta siento que tienes hinchadas las venas de tu pene dentro de mi colita papi!, malo, ayyyyyyy
Jo.
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Ahhh, ahhhhhhhhh, ¡ya déjate de quejar Sofía!, siempre has sido chillona, en todo, pero tú eres mi consentida, mi nenita mimada, ahhhh, ahhhhhhhhhh, mi cosita tierna, ahhhh, mi pequeño amor, además de que eres bien celosa con ellas, no dejas casi, ni que juegue con ellas, ¿porque eres así?, si yo las quiero por igual a las tres, ahhhhh, ahhhhhhhhhhhh, ahhh
So.
–
–
–
Sí papi, ayyy, ¡soy celosa de Aleida y de Sandra!, es que no me gusta que te las cojas a ellas, ayyy, por eso te doy todo de mí, hasta mi culito ya es tuyo, ayyy, ¿sí aguantó Sandra, con pa’-g?, ¡¡¡ yo porque no te he de aguantar a ti !!!, ayyyy, aunque me duela y llore papi, es tuyo mi cuerpecito, hazme lo que quieras, ¡ah, pero con cuidado eh!, ayyy, ayyyyyyyy, ya se me está pasando el dolor, ¿papi me vas a echar la lechita en mi culito?, o ¿dónde?, ayy, ayy
Pasados casi 50 minutos de tener penetrada a profundidad don José a Sofía, en su primera vez anal, se dio a hacer los movimientos de ritmo copulatorio de una manera suave y tranquila, mientras Sofía se quejaba de ese profanador de su anito, que la había desvirgado de su puerta trasera y a medida que dichos movimientos se hacían más rápidos ella también colaboraba parando más esa cola que de por sí, es muy respingona y carnudita, hasta que llegaron a sincronizar perfectamente ambos los movimientos y el ritmo que marcaba don José de entrar y salir, ya que mientras él hundía su grueso miembro erecto, ella respingaba más su cola y era un sonido de carnes que se escuchaban y los gemidos de Sofía eran ya los de siempre con voz de niña, o cómo dice don José, de muñeca de hentai, hasta que por fin salieron los primeros disparos de semen que inundaron ese estrecho anito con una potencia de antología, ya que Sofía receptora de esos chisguetes, sólo gemía y aceptaba estoicamente dentro de ella, esa marea de líquidos seminales, que vertidos de esa forma, fueron llegando más allá del colon descendente, ya que la chiquilla dentro de su excitación le dijo que le quemaba la leche, hasta su pancita.
Después de la tormenta viene la calma como en los huracanes, para hacer el recuento de daños, pues Sofía, posterior a esa penetrada que no fue salvaje, pero si fue intensa, se dio a llorar cómo siempre y a quejarse de dolor dentro de su culito y ardor en el anito, el cual le había quedado abierto de una manera catastrófica, don José se dio a llevarla al sanitario y la dejo sentada un rato a solas, y el en la puerta fumando un cigarrillo, escuchaba el llanto de su muñeca de hentai, que no cesaba, se imaginaba el mundo de pucheros y lágrimas que vierte siempre que le pasa algo, para entrar 15 minutos después, ya que escucho el sonido del baño evacuar su contenido, ya con unas compresas en mano se dio a la tarea de limpiarla, suavemente, lleno la tina de la ducha con agua casi fría, la sentó con cuidado, la baño completa de pies a cabeza y la dejó reposando un rato en la cristalina agua, mientras fue por una pastilla clásica para el dolor, un ungüento a base de lidocaína concentrada y lo necesario para higienizarla analmente, a lo cual ella se quejaba y hasta lloró de la intromisión de la cánula que haría el trabajo de lavar con un enema vertido en el depósito, los intestinos de su niña, la cargo y la llevó a la cama y a los pocos minutos Sofía cayó en los brazos de Morfeo, por un espacio de 5 horas durmió de ese desgaste que la sometió don José, al levantarse, y sentarse se dio a rodarse boca- abajo ya que no soportaba el peso de su cuerpo en el descansar su cola en la cama.
C O N T I N U A R Á.
NOTA:>>> Me permito comentar a mis distinguidos lectores que este era el último capítulo y final de la saga del relato, pero de momento han surgido nuevas hazañas tanto de Sofía y Aleida con don José y en la cual involucran a la pequeña Tania, quien es despertada a un mundo temprano de la sexualidad, por Aleida por ciertos “jueguitos morbosos y cachondos”, por lo que decidí darle otro episodio más, dentro de este erótico, candente, morboso y conflagrado relato de mi estimada y fina “Sofía volcán”, cómo así le dicen sus “hermanitas” y don José, por lo que él siguiente, ¡¡¡ sí, ya será el final !!!
Cómo siempre les comunico que todos los comentarios que ustedes viertan en relación al capítulo, a la saga y al relato en general, háganlo en mi perfil, ya les he comentado que las contestaciones respectivas a cada mensaje las hacen en mi ausencia la hermosa diva en pequeño Sofía y la tierna curvilínea y amigable Aleida quien también es muy educada para responderles, les dejo mis saludos y los comentarios hacía mi persona los contesto yo, desde donde me encuentro en el continente europeo, hasta pronto y espero disfruten cómo yo de la lectura que le realicen a este episodio.
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