En el ultimo vagon del metro
Como un viaje a la escuela se volvio algo que nunca iba a olvidar….
Hola, este es mi primer relato y es 100% real, espero que les guste.
Para comenzar me gustaría describirme, soy Gabriel, y en ese entonces tenia 18años, soy moreno, de 1.70m, siempre he sido muy delgado y soy de esas personas que no parecen tener su edad, siempre me decian que me veia mas joven y no me puedo quejar del paquete que me toco, que me ha servido muy bien en muchas ocasiones.
Ahora si empecemos con el relato. Todo empezó como cualquier otra mañana, me prepare para ir a la universidad, me vestí con una sudadera y unos jeans nada inusual, lo único diferente era que entraba un poco mas tarde, por lo que se me hizo fácil levantarme un poco después, cuando me di cuenta ya se me había hecho tarde.
Al llegar a la estación del metro como a las 9 de la mañana como se imaginaran, estaba hecho un relajo, gente por todos lados, vi el ultimo espacio en el metro y no estaba tan lleno como los otros lados, así que me dirigí hacia allí.
Una vez que subí, vi con tristeza que todo estaba lleno, asi que me puse justo en la parte de atrás entre dos chicos.
Las estaciones iban pasando y el vagón solo se llenaba más y más, hasta que quedo un chico justo en frente de mí, era de mi estatura aproximadamente, moreno y guapo, pero como a mi no me atraian los hombres no le di importancia, y seguí viendo mi celular, de repente empiezo a sentir que alguien me roza la entrepierna. Supuse que por lo lleno del metro habia sido un accidente, pero cada vez eran mas intensas así que mire hacia abajo y efectivamente era el chico que estaba frente a mí. Había escuchado historias de lo que pasaba en el último vagón pero nunca pensé que me pasaría a mi.
Intente moverme un poco pero no había lugar a donde moverse, al voltear vi a dos chicos que aprovechaban para darse unos arrimones, eso y el chico tocandome me empezó a poner muy caliente, guarde mi celular y parece que fue su señal para ponerse más intenso, sin descaro empezó a desabrochar mi cinturón, para ese momento yo ya me había excitado a tal punto que empecé a tocar su verga, se sentía dura y al traer pants podía sentirla con más facilidad.
Cuando logró quitarme el cinturón, desabrocho mi pantalón y bajo mi cierre lentamente mientras me veia a los ojos, cuando llego a mi miembro lo toco suavemente y en un momento que el metro se sacudió aprovecho para bajar mi boxer lo más que pudo. Yo no sabía que pensar, estaba desnudo de la cintura para abajo en medio de una docena de personas, pero no me importaba, solo queria que me tocara, asi que ya entrados hice lo mismo, bajé su pants y empecé a masturbarlo, su pene era más grande de lo que pensaba unos 18 cm y muy grueso, el tocaba mis huevos y me masturbaba como solo un hombre sabe hacerlo, al entrar mas en confianza, empezó a besarme el cuello, se sentía tan bien, pero intentaba alejarlo porque a pesar d mi calentura estabamos en frente de todos, a él no parecía importarle y siguió besandome y mastrubandome, yo seguía tocando su enorme verga, el metro se volvió a agitar y el aprovecho para acercarse lo mas que pudo, y empezar a besarme y tocar mi culito, me sentía como una putita pero me gustaba ese sentimiento, ser dominado por otro hombre, que nunca había visto y que me tocara y besara de esa forma solo hacia que quisiera más, hasta que no pude más y termine por venirme.
Hacía rato que no me venía tanto, estaba super apenado, pero el solo dijo «me hubieras avisado», se limpio mi semen en mi mientras se lamía los dedos. Intente ponerme los pantalones como pude porque tenia que bajar pronto, solo le dije esta es mi estación y me sonrió, no sin antes darme un buen agarrón de culo. El metro se fue dejándome un poco conmocionado por lo que había pasado.
Ese día descubrí que era un bisexual, que me gustaba el exhibicionismo y que era más caliente de lo que pensaba, hubo más situaciones como esta pero será para otra ocasión…
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