Mi nueva experiencia con mi perro.

Cómo comencé a jugar con mi perro….
Me llamo Florencia, tengo 18 años, soy medio alta, grandes tetas cintura delgada y algo de culo. Vivo con mis padres y un hermano menor. Pero lo que cuenta aquí es el perro.

Tenemos un perro de unos 4 años que es una cruza, así se dicen aquí a los que son callejeros un raza. Es un perro de tamaño mediano, bien juguetón y bruto, se llama Morrison.

Tengo un novio pero el está estudiando en otra ciudad y a mí me falta un año todavía para irme así que nos vemos pocas veces. 

Paso la mayor parte de los fines de semana sola ya que mi hermano se la pasa todo el día en lo de amigos y mis padres viajan o salen la mayor parte del día a caminar a algún lado. No hago mucho cuando estoy sola además de ver la tele y masturbarme de ves en cuando. 

Un día estaba sentada en el sillón y viene mi perro, el siempre tuvo la costumbre de querer montarse en mis piernas pero siempre lo sacaba, esta vez lo deje porque estaba muy enganchada viendo una serie pero al pasar un rato siento algo mojado en mis piernas, el perro había acabado sobre ellas. Me quedé paralizada al ver el pene rojo del perro y mis piernas manchadas, cuando reaccione lo rete muy fuerte y lo saqué afuera. Al ir a limpiarme toque un poco el semen con la mano y lo olí, no tenía un olor muy fuerte que digamos asique lo probé, tampoco sabía muy feo es más no sabía más feo que el semen de los hombres. No le di más importancia al asunto y volví a ver la tele.

Así paso la semana yo ya me había olvidado de lo que pasó y no ocurrió nada más durante esos días. Al llegar el fin de semana mis papás dijeron que iban a ir de viaje a la montaña y me preguntaron si quería ir, obviamente les dije que no porque me aburriría mucho, se llevaron a mi hermano porque no confían en que yo lo cuide, de todas formas no quería que se quede jaja. Pasó lo mismo del otro día, yo viendo tele y el perro vino a montarme las piernas. Pero esta vez lo aleje un poco y trate de agarrar su pene con mis pies pero parece que le lastima a un poco al no estar lubricada. Asique fui a buscar un lubricante de preservativos que tenía en mi cajón y lo puse en mis pies. El perro volvió a lo suyo y parece a ahora sí le gustaba porque no paraba de cojerme los pies. Estuvo así 5 minutos hasta que me acabo todos mis pies, al ver esa escena me moje mucho pero ya el no quería hacer nada porque se retiró y se fue afuera a dormir. Ahí estaba yo con mis pies todos acabados y muy caliente, no tuve otra opción que sacarme el shorts y pajearme ahí mismo. Pasaron unas horas hasta q volvió y se acostó a mi lado, yo seguía caliente por lo de antes y quería probar otras cosas, asique empecé a tocarle el saco dónde se guarda el pene, comencé a tocarlo suavemente hasta que note que empezaba a salir, quería pajearlo pero ya no tenía lubricante asique lo escupí un poco, y así estaba yo, sin pantalones arrodillada en el piso pajeando a mi perro. Me encantaba el ruido que hacía mi mano al subir y bajar con toda mi saliva, me excite tanto que comencé a chuparle el pene por unos minutos pero solo la puntita, luego seguí pajeandolo hasta q sentí que iba a acabar, asique puse mi cara bien cerca para que me la llene toda de su leche. 

Continuará.